Pugna entre los pa¨ªses occidentales y Jap¨®n por la designaci¨®n del nuevo director de la OMS

En medio de una batalla sin precedentes, los representantes de los 31 Estados del Consejo Ejecutivo de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) iniciaron ayer en Ginebra la reuni¨®n que designar¨¢ a su nuevo director general. La sustituci¨®n o reelecci¨®n del japon¨¦s Hiroshi Nakajima se ha convertido en el nombramiento m¨¢s re?ido de la historia de la organizaci¨®n que coordina las pol¨ªticas sanitarias en el mundo. Nakajima no cuenta ni con el apoyo de EE UU ni con el de la CE, que le reprochan una mala gesti¨®n y una direcci¨®n autoritaria. La reuni¨®n deber¨¢ tambi¨¦n aprobar un presupuesto para el ejercicio 1994-1995 estimado en 2.800 millones de d¨®lares (unos 325.000 millones de pesetas).

En la controvertida sustituci¨®n o continuaci¨®n del actual director general, Nakajima, que se decidir¨¢ el mi¨¦rcoles, los pa¨ªses occidentales favorecen la elecci¨®n del doctor argelino Mohamed Abdelmoumene, quien trabaj¨®, como segundo, a las ¨®rdenes directas de Nakajima y fue despedido de su cargo el pasado agosto, cuando anunci¨® que se presentar¨ªa al puesto.El propio embajador norteamericano Morris Abram es el m¨¢s determinado defensor del cambio al frente de la OMS, y para ello cuenta "con el apoyo de los otros grandes contribuidores, Canad¨¢, Dinamarca, Francia, etc¨¦tera. Parad¨®jicamente, los que menos representaci¨®n tienen en las decisiones", afirma Morris.

Pese a ello, considera que el cambio habido al frente del programa del sida, el relevo de Jolinattan Mann por el tambi¨¦n estadounidense Michael Merson, "ha sido una muy acertada decisi¨®n de Nakajima".

Las cr¨ªticas a Nakajima se extienden a las presiones del Gobierno japon¨¦s sobre los miembros de Ejecutivos de los pa¨ªses menos avanzados para conseguir su voto a cambio de ayudas bilaterales".

Para otros, sin embargo, el enfrentamiento entre Estados Unidos y Jap¨®n se basa sobre todo en conseguir el control de la prestigiosa organizaci¨®n.

Por su parte, la posici¨®n de Francia se basa en las declaraciones de su ministro de Sanidad, Bernard Kushner, que ha emprendido una cruzada para salvar las situaciones de urgencia en el mundo, criticando la falta de acci¨®n de la OMS, organismo dependiente de la ONU.

En cuanto al presupuesto previsto para el ejercicio 199495, se distribuye en 1.800 millones de d¨®lares para las actividades ordinarias y 1.000 millones de d¨®lares para las previsiones extrapresupuestarias. A nivel global, el presupuesto ordinario mantiene un crecimiento cero.

Este presupuesto aprobado por Nakajima dedica el mayor porcentaje (33%) al sida, que se ha convertido en el programa m¨¢s importante de la OMS, y contar¨¢ con 180 millones de d¨®lares; el paludismo y las enfermedades tropicales, con 197 millones, y las enfermedades diarreicas, entre las que se encuentra el c¨®lera, con 29 millones de d¨®lares.

Otra de las prioridades (23% del presupuesto) es reforzar las infraestructuras de los sistemas sanitarios de los pa¨ªses en desarrollo para acercar a sus poblaciones a los objetivos b¨¢sicos del Plan Salud para Todos.

Los otros sectores de actividades m¨¢s importantes son los dedicados a asistencia materno-infantil (115 millones de d¨®lares); promoci¨®n de la salubridad y aprovisionamiento de agua, prevenci¨®n de la contaminaci¨®n y seguridad qu¨ªmica (106 millones de d¨®lares) y la puesta a punto de medicamentos y vacunas esenciales.