Ayuntamiento y Comunidad se cuestionan los realojamientos tras incumplir todos los planes

El Consorcio para el Realojamiento de la Poblaci¨®n Marginada naci¨® como un proyecto innovador para dar vivienda y apoyo social a 2.670 familias chabolistas, la mayor¨ªa gitanas. Seis a?os despu¨¦s, tras incumplir todos sus compromisos, el Ayuntamiento, la Comunidad y la Delegaci¨®n del Gobierno se cuestionan si les interesa seguir con el programa. Argumentan que "en los ¨²ltimos a?os se han producido cambios sociol¨®gicos" entre los chabolistas, en alusi¨®n a la venta de droga. Pero a¨²n quedan 1.092 familias por realojar, adem¨¢s de otro medio millar de chamizos ilegales.

El programa comenz¨® lleno de expectativas. Ninguna comunidad aut¨®noma contaba con un plan tan completo dirigido a poblaci¨®n marginada de mayor¨ªa gitana. Ahora, despu¨¦s de seis a?os, las instituciones quieren pegar un frenazo, ver lo que se ha hecho, cuantificar lo gastado y decidir si dan el tiro de gracia al Consorcio, si lo limitan o lo reactivan. Para eso, el Ayuntamiento, la Comunidad y la Delegaci¨®n del Gobierno ha creado una comisi¨®n de t¨¦cnicos. Y antes de junio tomar¨¢n una decisi¨®n.El gerente del Consorcio, Jos¨¦ Luis G¨®mez, asegura que no ve ning¨²n inter¨¦s por dar el carpetazo en este af¨¢n institucional de analizar el trabajo realizado. Otros sectores, como la Federaci¨®n Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM), hablan, sin embargo, de "un intento de matar lentamente al Consorcio".

G¨®mez reconoce que el retraso de los planes viene de lejos. Seg¨²n ¨¦l, obedece a tres causas: "En 1987, el programa sufri¨® un par¨®n con la retirada del Gobierno central del proyecto; un a?o despu¨¦s, firmado ya un convenio entre el Ayuntamiento y la Comunidad, la explosi¨®n inmobiliaria encareci¨® el precio de los suelos que necesit¨¢bamos, y, ya en 1992, con todos los suelos, menos cuatro, sobre el plano, la corporaci¨®n municipal pidi¨® revisar el sistema de financiaci¨®n".El compromiso era construir, de 1986 a 1991, 2.186 viviendas para aquellas familias que quedaron, fuera del plan de barrios en remodelaci¨®n. M¨¢s tarde se ampli¨® el censo a otras 484 familias del Pozo del Huevo (Vallecas) y del Arroyo de Valdecelada (Carabanchel).

Diversos escollos

A?o tras a?o, el plan se ha ido encallando entre los problemas de financiaci¨®n, la falta de suelos y la oposici¨®n ciudadana. A estas alturas hay 1.438 familias realojadas, 878 de ellas en pisos. El 60% de las previstas.

El movimiento ciudadano siempre ha denunciado importantes retrasos. En 1989, los representantes vecinales se hac¨ªan eco de un malestar que luego result¨® prof¨¦tico. "Se est¨¢n viviendo momentos de conflictividad social que cualquier d¨ªa pueden desembocar en enfrentamientos", dec¨ªan. La droga entraba en los campamentos.

Dos a?os m¨¢s tarde, unos encapuchados -que nunca fueron detenidos- quemaron una vivienda del poblado de realojamiento que el Consorcio edificaba en Los Molinos (Villaverde), destinado a familias gitanas de Los Focos. Los vecinos se amotinaron, tach¨¢ndoles de n arco traficantes. Ayuntamiento y Comunidad cedieron a las presiones ciudadanas y la obra qued¨® parada sine die. En 1992, las administraciones hablaron de la necesidad de concluir, para fin de a?o, los 16 realojamientos pendientes.

Pero de los 22 campamentos que deb¨ªan estar ya construidos s¨®lo,existen seis: La Quinta (Fuencarral), La Rosilla (Vallecas), Plata y Casta?ar (Villaverde) y otros tres provisionales en Ribera de San Ferm¨ªn (Usera), Las Liebres (Fuencarral) y el Ca?averal (Vic¨¢lvaro). Dos est¨¢n en obras, el de La Celsa y el de Jauja, en Latina. De los restantes, en cuatro faltan suelos y en 11 no existen acuerdos de financiaci¨®n.