El premio

El Premio Mies van der Rohe, creado en 1987, se concede cada dos a?os a una obra concreta y tiene una dotaci¨®n de 50.000 ecus (siete millones de pesetas). Se trata, con el Europ¨¢n, del ¨²nico premio estrictamente europeo, instituido por el Parlamento Europeo y la fundaci¨®n barcelonesa Mies van der Rohe.En su primera edici¨®n, el galard¨®n recay¨® sobre el Banco Borges e Irmao en Vila do Conde de ?lvaro Siza, y en su segunda convocatoria, en 1990, sobre Stansted, tercer aeropuerto londinense, obra de Norman Foster.

Si el portug¨¦s ?lvaro Siza constituye el m¨¢ximo modelo para Esteve Bonell, el brit¨¢nico Norman Foster es, seg¨²n sus palabras, uno de los autores, con proyectos muy diferentes a los suyos, que m¨¢s han despertado su atenci¨®n. "Me intereso por manifestaciones que, estando alejadas de mi estilo, me inducen a pensar en alternativas". Cuenta el arquitecto gerundense, por ejemplo, que la idea de proyectar fachadas en planos convergentes, como las p¨¢ginas de un libro abierto, tal como aparecen en sus viviendas de la Villa Ol¨ªmpica, la obtuvo de una exposici¨®n del dibujante sueco Philip Guston a la que asisti¨® un domingo accidentalmente. "Yo siempre estoy pensando en t¨¦rminos de arquitectura, y cualquier experiencia en otros aspectos trato de traducirlo a ella". La idea de construir el Palacio de Deportes de Badalona con una forma oval en lugar de el¨ªptica la dedujo, seg¨²n su narraci¨®n, del libro Viaje a Italia, donde Goethe expresa su enorme emoci¨®n al entrar en el anfiteatro oval de Verona y sentirse envuelto por la naturaleza de ese espacio. Una de sus satisfacciones en relaci¨®n con el premio tuvo lugar cuando el jurado visit¨® el pabell¨®n y Foster, estrech¨¢ndole un brazo, le manifest¨® su entusiasmo.

Norman Foster formaba parte del jurado, junto a Kenneth Frampton, Ignasi de Sol¨¢ Morales y Alvaro Siza, entre otros. En la lista de finalistas se encontraban Cruz y Ortiz con la estaci¨®n de Santa Justa en Sevilla; Carlos Ferrater con el club n¨¢utico de L'Estartit; el cementerio de Igualada de Miralles y Pin¨®s; la estaci¨®n de Atocha, de Rafael Moneo, y el Palacio de Congresos de Salamanca, de Juan Navarro.

Aparte de Bonell y Rius, que adem¨¢s del Palacio de Deportes de Badalona optaban con la c¨¢rcel de Brians, s¨®lo Rem Koolhaas contaba con dos obras propuestas. Probablemente, junto con el famoso premio internacional Pritzker, el Mies van der Rohe ha logrado convertirse en cinco a?os en la distinci¨®n que mayor expectaci¨®n despierta.