Restos del cr¨¢neo de Hitler, en un tintero de un archivo ruso
Algunos fragmentos del cr¨¢neo del jefe nazi Adolf Hitler se encuentran depositados en el Archivo Estatal de Rusia, seg¨²n anunci¨® el director de este centro moscovita, Sergu¨¦i Mironenko, zanjando de esta forma d¨¦cadas de especulaci¨®n sobre el destino de los restos del aut¨®crata nazi. "Tengo en mis manos los restos del cr¨¢neo de Hitler", escribi¨® la periodista Ella Maximova en las p¨¢ginas del diario Izvestia el pasado jueves. Al ser interrogado para que confirmara el asunto, Mironenko dijo: "Los datos b¨¢sicos son verdaderos".Maximova escribi¨® que los restos del dictador nazi fueron guardados "con el m¨¢s estricto sigilo que quepa imaginar durante decenas de a?os, en un recipiente sellado con un r¨®tulo en el cual estaban escritas las palabras Tinta azul para plumas, junto con algunas part¨ªculas de madera ensangrentada procedente del sof¨¢ donde Hitler consumi¨® sus ¨²ltimas horas en el bunker berlin¨¦s.
Maximova dijo que hab¨ªa estudiado seis gruesos vol¨²menes de una investigaci¨®n sobre el destino de Hitler compilados por la NKVD, polic¨ªa pol¨ªtica de Stalin. Los documentos mostraban que Hitler y su compa?era, Eva Braun, se suicidaron en la tarde del 30 de abril de 1945, ante el avance de las tropas sovi¨¦ticas sobre Berl¨ªn. Sus cuerpos fueron rociados de petr¨®leo y quemados posteriormente en los jardines de la canciller¨ªa, para ser luego arrojados en un foso cubiertos con tierra y escombros.
Los restos fueron hallados el 4 de mayo por un soldado ruso, Iv¨¢n Churkov, que pis¨® en el cr¨¢ter de una bomba abierto sobre el suelo de la canciller¨ªa, sin apercibirse en un principio de lo que hab¨ªa encontrado. El lugar adonde los restos de Hitler fueron finalmente conducidos ha sido objeto de numerosas especulaciones, seg¨²n las cuales podr¨ªan hallarse en poder del KGB o de la nueva organizaci¨®n del servicio secreto en Rusia.
El art¨ªculo de Ella Maximova, publicado el jueves y el viernes en el diario Izvestia, corrobora que el caso ha quedado definitivamente cerrado y brinda a la opini¨®n p¨²blica la prueba de la muerte del jerarca del nazismo. En su informe se afirma que el cuerpo del cabo de Braunau fue incinerado hace al menos 20 a?os.
"Lo ¨²nico que quedaba de ¨¦l eran las mand¨ªbulas, y la dentadura -restos que permitieron su identificaci¨®n y la de Eva Braun- y el rumor de que esos restos se hallaban en los archivos de la seguridad estatal".
Hoy s¨®lo quedan fragmentos de huesos del cr¨¢neo. "Lo que queda son algunas partes de la nuca", se?ala Maximova. Los investigadores sovi¨¦ticos estuvieron indagando durante un a?o la muerte de Hitler porque sospechaban que pod¨ªa haber ordenado ser sustuido por un doble y escapar de Berl¨ªn. Ellos preguntaron a Hans Linge, mayordomo de Hitler, una de las escasas personas que presenciaron la muerte del F¨¹hrer, pero los investigadores concluyeron en 1946 con un interrogante. "Aunque todas las evidencias fundamentan la evidencia de Linge, seg¨²n la cual, [Hitler] puso fin a su vida cometiendo suicidio, la comisi¨®n de investigadores lleg¨® a la conclusi¨®n de que le resultaba imposible dar una opini¨®n definita", se?al¨® Maximova.-
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