Dos millones en el mundo

Los dos millones de radioficionados que existen en el mundo pueden entrar potencialmente en comunicaci¨®n entre s¨ª con sus propios equipos utilizando un c¨®digo universal de abreviaturas y el c¨®digo morse, aunque tambi¨¦n hablan frecuentemente en ingl¨¦s. La mitad de esta cifra, es decir, un mill¨®n, corresponde al n¨²mero de radioaficionados japoneses. Le sigue Estados Unidos, donde operan 500.000.

Espa?a, con sus 52.000 radioaficionados en sentido estricto y cerca de 200.000 usuarios de banda ciudadana (que tiene un radio de acci¨®n muy limitado a determinadas zonas urbanas) es el tercer pa¨ªs de Europa en n¨²mero de radioaficionados, despu¨¦s de Alemania y el Reino Unido. Para no interferir en otro tipo de comunicaciones los radioaficionados operan en bandas que van desde 29.100 kilohercios hasta otras no inferiores a 144 megahercios.

Casi 6.000 radioaficionados espa?oles colaboran con Protecci¨®n Civil formando de manera altruista la Red Radio de Emergencia, una malla de comunicaci¨®n para la prevenci¨®n de cat¨¢strofes y para intervenir en aquellas que ya se. han producido y que requieren actuaci¨®n inmediata. Algunas de las ¨²ltimas intervenciones de este grupo se registraron en la cat¨¢strofe del petrolero Mar Egeo, el pasado mes de diciembre, en la costa coru?esa.

El coste medio de un equipo de radioaficionado que utiliza frecuencias internacionales es de unas 150.000 pesetas, aunque los equipos de alcance local (caso de la banda ciudadana) pueden costar unas 50.000 pesetas.