Los jardineros temen por la vida de las ardillas de la Casa de Campo ante la falta de comida
Los jardineros municipales de la Casa de Campo est¨¢n preocupados por la falta de limpieza en muchos de sus pinares ante el riesgo de un hipot¨¦tico incendio y por la supervivencia de las ardillas que habitan estos ¨¢rboles, porque les falta comida. El Ayuntamiento de Madrid vende la retirada de los pi?ones a una empresa particular y obtiene por ello 400.000 pesetas al a?o. Los responsables de Medio Ambiente reconocen que el beneficio econ¨®mico es rid¨ªculo, pero afirman que las pi?as, precisamente durante un fuego, pueden llegar a comportarse como proyectiles.
La preocupaci¨®n ecol¨®gica por las ardillas de la Casa de Campo no es una an¨¦cdota. Hace apenas cinco a?os estos animales no se ve¨ªan en ninguna de las 1.722 hect¨¢reas del mayor parque municipal de Madrid y ahora, tras una acertada pol¨ªtica de repoblaci¨®n, se cuentan por decenas. Los jardineros calculan unas 200, y los responsables municipales rebajan la cifra a un centenar.El Ayuntamiento, desde hace m¨¢s de 10 a?os, saca a concurso la limpieza de las pi?as que caen de los miles de pinos de este parque. Para las arcas municipales lo importante no son los ingresos que se obtienen de esta operaci¨®n: 388.000 pesetas en 1992 y 400.000 en 1993. Los empresarios que se hacen con este concurso, en este caso sevillanos, llenan varios camiones de pi?ones para su venta.
Comida y atropellos
Responsables sindicales y encargados de los jardines municipales han observado que ante la falta de pi?ones en su espacio vital las ardillas tienden cada vez m¨¢s a aproximarse en busca de cualquier alimento a la parte m¨¢s visitada de la Casa de Campo, una zona colapsada de personas y muy transitada por veh¨ªculos. Ya se han comprobado varios atropellos.Portavoces del ¨¢rea de Medio Ambiente matizan que lo fundamental de este concurso no es su inter¨¦s cremat¨ªstico, que se reconoce "rid¨ªculo", sino que cubre un servicio que el escaso personal municipal no podr¨ªa realizar. "El problema de las pi?as es que son un peligro potencial, porque se convierten, en caso de incendio, en aut¨¦nticos proyectiles y, por tanto, en un elemento de propagaci¨®n del fuego", manifest¨® Santiago Romero, jefe, de Parques y Jardines del Ayuntamiento.
Romero defiende que los, pi?ones no son el ¨²nico alimento posible de las ardillas. Adem¨¢s interpreta que los sindicatos de la secci¨®n de parques y, jardines est¨¢n molestos porque no se cubren los puestos que quedan vacantes en este departamento y temen que se privatice la conservaci¨®n de m¨¢s zonas verdes municipales.
Los jardineros tienen efectivamente ese temor, y reclaman que se ocupen todas las plazas, pero se?alan que para el riesgo de incendios en la Casa de Campo lo verdaderamente peligroso es no tener bien limpios de ramajes secos los pinares y dedicar podadores a trabajos menos prioritarios como eliminar la grafiosis de unos olmos rebrotados. Dos redactores de este peri¨®dico comprobaron esta afirmaci¨®n el viernes de la pasada semana.
Un portavoz de Medio Ambiente asegur¨® que la decisi¨®n de relegar a un segundo plano la retirada de las ramas secas de los pinos se tom¨® por parte de la m¨¢xima responsable del ¨¢rea, la concejal Esperanza Aguirre.
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