Dos pol¨¦micas construcciones enturbian la expansi¨®n urbana de Santiago de Compostela

Un polideportivo que supera en casi tres metros la altura permitida enturbia el perfil arquitect¨®nico de Santiago de Compostela, uno de los m¨¢s impresionantes de Europa. La Comisi¨®n de Patrimonio, controlada por la Xunta de Gaficia, que preside Manuel Fraga, ha paralizado las obras, contra la opini¨®n del alcalde, Xerardo Est¨¦vez, del PSOE, que defiende ese edificio contempor¨¢neo. Mientras tanto, en el Monte del Gozo, lugar simb¨®lico desde donde los peregrinos divisan por primera vez la catedral, prosiguen unas obras auton¨®micas y municipales de m¨¢s de 3.000 millones de pesetas que incluyen c¨¢mping, auditorio para 40.000 personas y albergues para 3.000 peregrinos. Una concejal de la oposici¨®n califica todas estas actuaciones como "adefesios".

Desde el parque de la Herradura, la arquitectura compostelana, patrimonio de la Humanidad, ofrece una panor¨¢mica emocionante. Pero ahora, uno de los ¨¢ngulos provoca rechaz¨®: se trata del esqueleto de un polideportivo, obra de Joseph Paul Kleihus. El complejo supera la altura permitida en casi tres metros, seg¨²n lago Seara, director general de Patrimonio de la Xunta de Galicia. Seara explica que cuando se aprob¨® el proyecto se puso una condici¨®n: "Que desde ese lugar excepcional de la Herradura no se rompiese la hist¨®rica secuencia de edificios y tejados hasta la catedral". Eso no se ha cumplido, dice Seara, que propone que se reconstruya la obra de acuerdo a lo acordado inicialmente.

Extrema prudencia

El alcalde, Xerardo Est¨¦vez, arquitecto, defiende el proyecto y la inclusi¨®n de obras contempor¨¢neas en los conjuntos hist¨®ricos, aunque admite que se debe obrar con extrema prudencia. En su opini¨®n, el secreto de esa perspectiva de Santiago es que "los edificios se solapan hasta llegar a la catedral, y el de Kleihues est¨¢ perfectamente integrado en esa cascada". Sostiene que cuando la construcci¨®n est¨¦ terminada ser¨¢ "una lecci¨®n de arquitectura". Est¨¦vez ha planteado un recurso a la paralizaci¨®n de las obras.Respecto al Monte del Gozo, a las afueras de Santiago, el Consejo de la Cultura Gallega, instituci¨®n asesora de la Xunta, se quej¨® de las obras que est¨¢ ejecutando la propia Xunta, sobre un proyecto municipal, en ese significativo lugar. A esta cr¨ªtica se unieron intelectuales, ecologistas, arquitectos y tambi¨¦n Encarna Otero, ¨²nica concejal del Bloque Nacionalista Gallego en el Ayuntamiento. Todos propon¨ªan repoblar la zona con vegetaci¨®n aut¨®ctona y rio intervenir en nada m¨¢s. Otero dice que de las construcciones, "barbaridad" que en su opini¨®n rompe el encanto del monte para siempre, hay dos, una iglesia y una residencia religiosa pertenecientes a la Iglesia que, adem¨¢s, son ilegales, y cuyo proyecto es obra del director general de Patrimonio de la Xunta, lago Seara.

Seara niega que las obras sean ilegales, dice que la Comisi¨®n de Patrimonio no les puso ninguna objeci¨®n y matiza que hizo el proyecto antes de ocupar su cargo actual. A?ade que cuando todo el Monte del Gozo est¨¦ acabado, la perspectiva mejorar¨¢ much¨ªsimo, "porque las construcciones est¨¢n alejadas m¨¢s de 50 metros del propio camino y hay masa arb¨®rea a ambos lados".

Xerardo Est¨¦vez destaca que s¨®lo est¨¢ construido entre un 15 y un 25% de los 500.000 metros cuadrados del Monte del Gozo. Dice que lo dominante es el conjunto verde y que las arquitecturas pasan inadvertidas.