Ram¨®n Tamames advierte sobre la destrucci¨®n de la Tierra
"Si no resolvemos los problemas de los pobres de la Tierra, tendremos muchos m¨¢s problemas nosotros", dijo anoche el economista Ram¨®n Tamames en la presentaci¨®n de su nuevo libro, La reconquista del para¨ªso (Temas de Hoy). El libro, inspirado en la Cumbre de la Tierra de R¨ªo de Janeiro, advierte de la necesidad de proteger y hacer de este planeta "un h¨¢bitat hospitalario para todas sus especies, no s¨®lo para el hombre". Tamames, que aludi¨® en numerosas ocasiones a pasajes y personajes b¨ªblicos, se mostr¨® esperanzado frente a una soluci¨®n que, a su modo de ver, ha de ser global.
Apocalipsis
No fue ¨¦se el caso de Fernando S¨¢nchez Drag¨®, quien present¨® el libro y para quien la situaci¨®n ha llegado a un punto de irreversabilidad. Seg¨²n dijo S¨¢nchez Drag¨®, los que quieran y sepan, que recen. El Premio Planeta (le este a?o se refiri¨® a unos "Informes estremecedores" de un grupo de cient¨ªficos de prestigio internacional, seg¨²n el cual el ox¨ªgeno de la Tierra ha descendido entre un 23% y un 7%, seg¨²n los puntos, y dentro de pocos a?os comenzar¨¢n a asfixiarse los seres m¨¢s d¨¦biles, antes que los dem¨¢s. Siempre de acuerdo con este informe, el mundo tiene cuerda para diez a?os, y el apocalipsis est¨¢ a la vuelta de la esquina.S¨¢nchez Drag¨® se refiri¨® igualmente a una hip¨®tesis que se comienza a manejar con cierta insistencia, seg¨²n la cual la Tierra es un organismo dotado (le inteligencia y como tal se defiende de sus agresores. Esa fue la causa de que los dinosaurios fueran exterminados a causa de un virus, de la misma manera que hoy los agujeros de ozono y la baja en las defensas que permiten el desarrollo de enfermedades como el sida, se corresponden con un empobrecimiento general de la naturaleza. "0 llegamos a un pacto con Gaya (la diosa griega de la Tierra)", dijo S¨¢nchez Drag¨®, "o estamos fritos".
Siempre de acuerdo con S¨¢nchez Drag¨®, el libro de Tamames viene a abrir el a?o electoral, toda vez que la opci¨®n verde ser¨¢ una de las que sin duda determinar¨¢n el futuro del Parlamento.
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