Consenso y equilibrio
El documento enviado por el Gobierno al CES incide en varias ocasiones en la bondad de conseguir un consenso con los agentes sociales y en mantener el equilibrio en los intereses contrapuestos de empresarios y trabajadores.El Gobierno "est¨¢ decidido a llevar adelante esta reforma" pero conf¨ªa que bien como resultado del propio debate o "por influencia de las medidas de reforma que se adopten por los poderes p¨²blicos, los interlocutores sociales asuman responsablemente su papel y hagan frente a los desaf¨ªos que el nuevo entorno plantea al sistema de relaciones laborales". "La asunci¨®n por parte de cada uno de los agentes sociales de las responsabilidades que le competen deseablemente deber¨ªa verse complementada por un exquisito respeto a un irrenunciable equilibrio en el reparto de las modificaciones que afecten a los intereses contrapuestos de los agentes sociales. No conviene olvidar que una buena parte de la regulaci¨®n actualmente vigente procede de un acuerdo entre la patronal y los sindicatos, y que no ser¨ªa deseable que una eventual modificaci¨®n de la regulaci¨®n actual no fuese nuevamente del mayor grado de consenso posible entre intereses profesionales".
En el nuevo modelo el Estado continuar¨¢ fijando normas de derecho m¨ªnimo necesarias para que los interlocutores sociales desarrollen su autonom¨ªa. En este sentido, se defiende reforzar los mecanismos de consulta y negociaci¨®n entre empresarios y trabajadores previos a las tomas de decisi¨®n que los empleadores decidan "para garantizar la supervivencia de la empresa y el mantenimiento del mayor empleo posible". Pero adem¨¢s, el modelo debe garantizar que las medidas necesarias se lleven a cabo, incluso sin acuerdo entre las partes, en cuyo caso "y como ocurre en nuestro entorno europeo" las medidas adoptadas deben "someterse al control jurisdiccional posterior". Se aboga, pues, por una redefinici¨®n del papel de la Administraci¨®n "eliminando aqu¨¦llas cuestiones cuasi jurisdiccionales que perviven como anacr¨®nicos residuos del sistema preconstitucional de relaciones laborales".
El informe mantiene que la modernidad de la legislaci¨®n espa?ola "es m¨¢s aparente que real" ya que todav¨ªa pervive gran parte de la legislaci¨®n franquista.
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