15 triples despejan el futuro del Estudiantes

Estudiantes se agarr¨® a los triples para solucionar el compromiso m¨¢s dificil de la temporada. Los 45 puntos desde mas all¨¢ de la l¨ªnea de 6,25 le garantizan la presencia en Europa el pr¨®ximo a?o y le salvan de la cat¨¢strofe econ¨®mica. Los patrocinadores no financian a median¨ªas.El equipo colegial volvi¨® a ser un conjunto temible y dej¨® una marca dif¨ªcil de batir para los archivos de la ACB: 15 tiros de tres puntos convertidos de 23 intentados, con un 65 % de acierto. As¨ª no hay qui¨¦n pierda.

El enemigo interior (los nervios y el exceso de responsabilidad) fue doblegado en la caseta. El Estudiantes sali¨® mentalizado para ganar y arroll¨® de salida a un despistado TDK. Un 14-7 en tres minutos (adornado con cuatro triples) anunciaba un ajusticiamiento en toda regla. Pablo Mart¨ªnez, un veterano de 21 a?os, dirig¨ªa al equipo con fluidez, Herreros tomaba la responsabildad y anotaba como un poseso y el croata Danko Cvejticanin hac¨ªa m¨¦ritos para que la Demencia empiece a hacer una colecta para ponerle un monumento en la calle Serrano.

Yeti (as¨ª le ha bautizado la hinchada) saca el libro en los momentos complicados y dicta la clase: canastas de dos y de tres, entradas por el lado mas dif¨ªcil, inteligencia, colocaci¨®n, reflejos... un dechado de virtudes. Es un hombre at¨ªpico en la jungla del profesionalismo. La gente le grita: " Yeti, eres el mejor"; ¨¦l se da la vuelta, mira a la grada, esboza un sonrisa y levanta la mano en se?al de agradecimiento.

El TDK no agach¨® la cabeza. Es un conjunto muy limitado, con un buen quinteto titular, pero sin banquillo. Pedro Mart¨ªnez tiene que hacer encaje de bolillos para proteger a sus p¨ªvots, Singleton y Hall. Para ello necesita blindar la zona con las ayudas de los aleros, que conceden unos cent¨ªmetros muy valiosos para que los tiradores rivales salten con m¨¢s comodidad en sus lanzamientos. A los locales, sin Mart¨ªnez y Cvjeticanin, se les oscureci¨® el cerebro. Las ideas no estaban tan claras, pero aguantaron el chaparr¨®n (46-32, en el descanso).

La paliza se presagiaba en la segunda parte. El Estudiantes apretaba el acelerador y lograba pronto una diferencia de 20 puntos. Los triples segu¨ªan cayendo como el granizo. Pero el TDK volvi¨® a la carga y se meti¨® de nuevo en el partido (M 35, 72-67). Entonces apareci¨® Danko Cvejeticanin. Pidi¨® el bal¨®n, se lo dieron y se acab¨® el Manresa.