Por amor al arte

La noche del 29 de abril (aniversario del nacimiento de Jean-Georges Noverre, figura capital de la historia del ballet) es desde hace cinco a?os una fiesta en Madrid, una cita obligada en el teatro Alb¨¦niz, donde se baila por amor al arte, donde se reivindican las mismas cosas de siempre y donde se homenajea a alguna figura indiscutible. Este a?o los laureles y la reverencia han ido a parar a Mar¨ªa de ?vila, sin duda la mejor maestra de ballet de Espa?a y un verdadero ejemplo de rigor y constancia, tal como la glosara Jos¨¦ Antonio Ruiz en su discurso de presentaci¨®n. Todav¨ªa insustituible, su legado did¨¢ctico tiene semillas crecidas, como Lolita de ?vila, su hija, V¨ªctor Ullate y Carmen Roche. Su proverbial severidad ser¨¢ una lecci¨®n a aprender por todos.Mar¨ªa de ?vila fue breve, casi escueta en su agradecimiento, pero lo dijo todo. Habl¨® emocionadamente del significado del homenaje, que ven¨ªa a reunir a antiguos compa?eros de viaje, de sinsabores y de alegr¨ªas. Actualmente, en el terreno del ballet, hay m¨¢s ac¨ªbar que az¨²car. La absurda pol¨ªtica oficial de la cultura para con la danza, y especialmente para con el ballet cl¨¢sico, niega obstinadamente, y haciendo gala de ignorancia e ignominia, que en Espa?a haya tradici¨®n de ballet. Se navega en un mar proceloso, y all¨ª est¨¢n los bailarines, recordando a sus muertos, bailando de manera desigual, pero entregados. La ¨²nica autoridad presente en la gala, Juan Francisco Marco, director general del INAEM, permaneci¨® en su butaca s¨®lo 15 minutos, y se march¨®. La gala dur¨® tres horas y el teatro estaba abarrotado de amantes del flamenco, la danza moderna y, claro est¨¢, del ballet cl¨¢sico.

De los participantes puede decirse que el tono tribal de Ukanga desconcert¨® lo suyo, lo mismo que, por otras razones, la coreograf¨ªa de Luis Fuente, con una saturaci¨®n de pasos obsesiva y recargada; 10 & 10 arranc¨® los primeros bravos con su tr¨ªo potente y agresivo, pero muy bailado. Goyo Montero sali¨® a demostrar que sigue los pasos de su padre, con arrojo y virtuosismo. Amaya Iglesias no tuvo una buena noche, lo que no quiere decir que le falte belleza, l¨ªnea y talento, pero sigue verde y escolar, no ha tenido el despegue precoz de sus antecesoras Sevillano y Arg¨¹elles. El cubano Ismael Lorenzo hizo lo que pudo, pero la falta de ensayos y preparaci¨®n hizo estragos.

Finalmente, en el flamenco, Carmen Cort¨¦s, Bel¨¦n Maya y Mario Maya dieron salida al j¨²bilo y la jondura de sus bailes raciales, profundos, sentidos y vibrantes. El p¨²blico les tribut¨® largas ovaciones.

Otra frase del discurso de Jos¨¦ Antonio llamaba a que la celebraci¨®n del D¨ªa Internacional de la Danza no perdiera nunca su car¨¢cter reivindicativo y luchador. Hoy m¨¢s que nunca tal ¨¢nimo debe mantenerse a toda costa; es algo as¨ª como el instinto de conservaci¨®n.