Remedios para un mundo enfermo

J. F. B., "El mundo est¨¢ enfermo; el ser humano est¨¢ enfermo, porque se ve afectado por las perniciosas consecuencias de la extrema riqueza o de la extrema pobreza, pero las soluciones s¨®lo pueden ser v¨¢lidas cuando se aplican en escalas humanas muy concretas". Esto piensa Manfred A. Max-Neef, rector de la universidad bolivariana de Santiago de Chile y uno de los candidatos a presidente en las pr¨®ximas elecciones de su pa¨ªs.

Max-Neef ha sorprendido a la veintena de expertos que han participado en los encuentros de Cuenca con una bater¨ªa de soluciones concretas -¨¦l las ha llamado Nueve necesidades b¨¢sicas que tiene que tener cubiertas el ser humano para lograr la satisfacci¨®n- que se deben poner en pr¨¢ctica para librarse de la sociedad competitiva.

En primer lugar sit¨²a la subsistencia, pero ¨¦sta no ser¨ªa posible si no fuera acompa?ada de la protecci¨®n y la afectividad. El ser humano necesita en cuarto lugar entender y comprehender el mundo que le rodea, y necesita tambi¨¦n participar en diferentes proyectos, lo que le exige previamente desarrollar su creaci¨®n o creatividad. El ciclo de necesidades b¨¢sicas se completa con el ocio, la identidad y la libertad.

"Que esto lo diga un economista podr¨ªa sorprender a muchos", se?ala Max-Neef, tratando de adelantarse a las cr¨ªticas que se han anticipado a esta propuesta. "Pero lo sostengo porque soy un economista que no me he olvidado del ser humano, a quien jam¨¢s he considerado como un conjunto de cifras. Lo siento, pero las cifras apenas dicen nada si no interpretas la historia humana que hay detr¨¢s de ellas".

El economista chileno, miembro del Club de Roma, explica, "para que no se malinterprete", que quien est¨¢ enfermo no es el mundo, sino el hombre, "ya que hay m¨¢s enfermos que enfermedades, y por eso es un absurdo pretender que todos los pueblos son iguales y que todos necesitan la misma medicina".