La resaca
En la retina de los espa?oles quedar¨¢ la imagen tambaleante de Felipe Gonz¨¢lez ante el cuerpo de un alfe?ique que exigi¨® comparecer sentado para no desmedrarse ante el l¨ªder carism¨¢tico y termin¨® la velada aceptando medirse de pie, en cualquier parte, con cualquier arma, para cualquier otro duelo, en el que conf¨ªa prevalecer. El m¨¢ximo inter¨¦s electoral en el tramo que discurre desde el lunes de Antena 3 al lunes de Tele 5 se ha concentrado en el cara a cara y a despecho de todas las otras opciones de la campa?a.Como una estela a la velocidad de la luz, la pol¨ªtica partidista espa?ola ha pasado, de no existir a homologarse, en dos zancadas, con los vac¨ªos estereotipos norteamericanos. De un desierto a otro desierto, de una impotencia a otra. Recuerda esta din¨¢mica la acelerada asimilaci¨®n espa?ola de otras modas extranjeras. Cuando apenas empez¨¢bamos en los primeros sesenta a disfrutar del arrime en las verbenas, estall¨® el rock que preceptuaba la distancia; cuando inaugur¨¢bamos la expresi¨®n libre y plural de las ideas, sobreviene como modelo televisivo el restricto mundo del t¨² a t¨² entre proyectos que, como repite Anguita desde su mente flam¨ªgera, parecen conmutables. Por los alrededores de este n¨²cleo medi¨¢tico se est¨¢n gestando fen¨®menos de rebeld¨ªa, subversiones, autismos, anticonsumismos, nuevos entendimientos de lo social fin de siglo que no aparecen en el televisor o lo hacen como subproductos. No es extra?o que un n¨²mero cada vez mayor de j¨®venes y adultos contemplen con cinismo la materia en que se ha convertido la pol¨ªtica. Es cierto que el PP no ense?a su programa, lo tenga o no lo tenga. Para el PP ser¨ªa sencillo, en 24 horas, remedar propuestas internacionales y espolvorearlas de maquillaje nacional. No pierden el tiempo en ello. Deliberadamente, han entendido que el programa es una hipoteca y la pol¨ªtica un programa de televisi¨®n. De la pel¨ªcula del Estado polic¨ªa hemos pasado, casi sin cortes, a la pornograf¨ªa; de la represi¨®n a la televisi¨®n. Ni siquiera hemos podido arrimamos en la verbena social. ?Es a esto a lo que hab¨ªamos aspirado? ?Es esto, al fin, la pol¨ªtica? ?Un prime rate, un scope, un ¨¦xito de Tele 5 o de Antena 3? ?Puede asumirse. que el porvenir de una naci¨®n, por a?os, se dilucide en un juego de minutos? ?Qu¨¦ espectador puede saber si las cifras circenses que se lanzan de uno y otro lado son ciertas, ama?adas, falsas de ra¨ªz? ?Qu¨¦ elector es capaz de identificarse vitalmente si nadie expresa un ideario? Es ¨¦ste el desierto de una nueva dictadura. La dictadura de la emoci¨®n. La mano de cualquier elector tiembla ahora al depositar su voto porque ser¨¢ una corazonada, apenas un reflejo en la mand¨ªbula, una frase, una impericia del candidato, lo que le gu¨ªa en su elecci¨®n. Aut¨¦nticamente americano.
HOY EN TELEVISI?N
21.40 / TVE-1. Entrevista con l?aki Anasagasti en 'Elecciones 93'.
23.00 / Antena 3. Julio Anquita responde a las preguntas de un grupo de periodistas en 'La noche de Hermida'.
0.20 / Tele 5. Xabier Arzalluz es entrevistado en 'Mesa de redacci¨®n'.
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