¡®No al aborto tras violaci¨®n¡¯, ¡®s¨ª a la terapia para gais¡¯ y otras ideas que van rumbo al Senado
La trayectoria de los implicados en la cumbre de este lunes en la C¨¢mara alta muestra un fanatismo que sus organizadores intentan maquillar
¡°La libertad, Sancho, es uno de los m¨¢s preciosos dones que a los hombres dieron los cielos¡±, le dec¨ªa don Quijote a su escudero en un pasaje de la novela cervantina. Y la cita aparece, en cuerpo destacado, en mitad del programa de la VI Cumbre Transatl¨¢ntica de la Red Pol¨ªtica de Valores, que lleva por t¨ªtulo Por la libertad y la cultura de la vida. El Quijote, la libertad, la cultura y la vida. ?Cabe algo m¨¢s universal? Adem¨¢s, los nombres de los impulsores de la cumbre y sus actividades programadas componen un campo sem¨¢ntico de ¡°derechos humanos¡±, ¡°democracia¡±, ¡°educaci¨®n¡±, ¡°familia¡±... M¨¢s universalidad. Para rematar, el sello del Senado del Reino de Espa?a en la lista de entidades colaboradoras, justo bajo la imagen de la Puerta de Alcal¨¢, otorga al programa una p¨¢tina institucional.
Pero no todo es lo que parece. Tras la fachada oficial de la cumbre de este lunes en el Senado emerge un grupo multinacional de pol¨ªticos y activistas de extrema derecha cristiana que comparten la beligerancia contra el aborto ¡ªtildado de crimen¡ª y el rechazo al ¡°feminismo radical¡±, el ¡°lobby LGTBI¡±, la ¡°ideolog¨ªa de g¨¦nero¡± o la ¡°cultura woke¡±. Y ese ideario es solo la base, el com¨²n denominador. La cumbre abre la C¨¢mara alta a defensores de posiciones que desbordan en radicalismo el acervo t¨ªpico de la ultraderecha europea. En el rastro que dejan el grupo organizador, Red Pol¨ªtica de Valores, ponentes de la cumbre y entidades colaboradoras caben posturas como la oposici¨®n al aborto, incluso en caso de violaci¨®n y la defensa de las terapias de conversi¨®n de homosexuales.
Desde octubre, cuando se conoci¨® que la Mesa del Senado hab¨ªa cedido una sala a Red Pol¨ªtica de Valores (PNfV, por sus siglas en ingl¨¦s) para celebrar una ¡°cumbre¡± antiabortista y numerosos grupos de izquierdas, el PNV y Junts pidieron su suspensi¨®n, esta entidad ha insistido en que no cabe aplicarle la etiqueta de ¡°extremista¡±. Lo hizo entonces con un comunicado, en el que rechazaba que su ¡°ideario¡± mereciera este adjetivo. Y lo ha hecho esta semana, en respuesta por escrito a este peri¨®dico. ¡°Normalmente, esos calificativos son utilizados por quienes realmente son extremistas para estigmatizar a quien piensa diferente. [...] Estamos orgullosos de afirmar los valores que nos unen¡±, se?ala Diego Hern¨¢ndez, portavoz de PNfV.
En dicha respuesta, Hern¨¢ndez afirmaba el mi¨¦rcoles que PNfV iba incluso a mantener como ponente a George Peter Kaluma, diputado keniano defensor de la cadena perpetua para homosexuales. No obstante, tras publicar EL PA?S sus antecedentes, su nombre desapareci¨® de la lista de participantes. La organizaci¨®n se ha resistido a explicar por qu¨¦ primero defendi¨® la libertad de expresi¨®n de Kaluma ¡ª¡°nosotros no silenciamos a nadie en funci¨®n de sus convicciones¡±¡ª y luego lo cancel¨®. ?Suprimi¨® su participaci¨®n PNfV para estrechar las posibilidades de que la cumbre sea tachada de extremista? No hay respuesta. Lo seguro es que sigue habiendo margen para usar ese adjetivo.
Aborto y violaci¨®n
¡°Las violaciones son brutales todas. Pero, ?el ni?o que est¨¢ ah¨ª tiene que pagar esa brutalidad con la muerte?¡±. La pregunta la lanzaba, en un plat¨® televisivo en 2017, el l¨ªder ultraderechista chileno y excandidato presidencial Jos¨¦ Antonio Kast. Una de las entrevistadoras le pregunt¨® qu¨¦ aconsejar¨ªa ¨¦l a su hija. ¡°No le recomendar¨ªa el aborto. Yo no voy nunca a inducirlas a un aborto, nunca¡±, respondi¨® Kast, que afirmaba conocer casos de mujeres que se quedaron embarazadas en una violaci¨®n y acabaron diciendo: ¡°Mira, esta guagua me sac¨® de un infierno¡±. ¡°Guagua¡± significa beb¨¦.
En la campa?a presidencial de aquel a?o, Kast se fotografiaba sonriente con dos mujeres con sendos carteles. ¡°Concebida en violaci¨®n. Amo mi vida¡±, dec¨ªa uno. El otro: ¡°Madre de dos angelitos, uno por violaci¨®n¡±. Hoy Kast es presidente de Red Pol¨ªtica de Valores, organizadora de la cumbre en el Senado. Su equipo en el Partido Republicano no responde si Kast es partidario de prohibir el aborto en caso de violaci¨®n.
El aborto tras violaci¨®n es un asunto espinoso en los c¨ªrculos autodenominados provida. Incluso antiabortistas dr¨¢sticos evitan mojarse. Son casos ¡°extremos¡± en los que no hay que centrar el debate, afirm¨® en una entrevista en 2022 el exministro del PP Jaime Mayor Oreja, directivo de PNfV y ponente en la cumbre. No abundan los que se pronuncian por el no. Pero los hay, aunque sin llegar ¡ªal menos, entre los ponentes en la cumbre¡ª a defender la prohibici¨®n. Uno es el m¨¦dico brit¨¢nico Calum Miller, ponente confirmado en el evento del Senado, que afirmaba en 2022 en su blog: ¡°El aborto [...] a?ade un segundo trauma a la v¨ªctima y una segunda v¨ªctima al crimen¡±.
Colaboradora con la cumbre, la Fundaci¨®n Heritage tambi¨¦n rechaza el aborto tras violaci¨®n. Influyente laboratorio de ideas en la ¨®rbita trumpista, esta entidad afirma en su argumentario provida que ¡°el aborto aumenta el da?o [...] a la mujer y a?ade otra v¨ªctima a un crimen que ya es terrible¡±. ¡°Deber¨ªamos proteger la vida de cada ni?o, independientemente de c¨®mo haya sido concebido¡±, a?ade.
Ni Miller ni la Fundaci¨®n Heritage respondieron a este peri¨®dico.
Terapias de conversi¨®n
Heritage aporta dos ponentes a la cumbre. Uno es Jay Richards, detractor de la ¡°teor¨ªa cr¨ªtica de la raza¡±, que explica el car¨¢cter estructural del racismo en Estados Unidos y que para Richards es ¡°incompatible con el experimento americano¡±. La otra es Grace Melton, que se opone a la prohibici¨®n de las llamadas ¡°terapias de conversi¨®n¡±, t¨¦rmino que rechaza por ¡ªa su juicio¡ª connotar negativamente lo que le parece algo positivo: la posibilidad de tratar psicol¨®gicamente a un homosexual para que deje de serlo.
La polaca Ordo Iuris, otra entidad que colabora con la cumbre, tambi¨¦n se opone a la prohibici¨®n de la ¡°terapia de conversi¨®n¡±, ya que ¡°violar¨ªa los derechos de los pacientes que no aceptan sus inclinaciones homosexuales¡±, seg¨²n sostiene en un informe sobre ¡°protecci¨®n de la vida y la familia¡±. ¡°No somos defensores ni opositores de ninguna terapia. Somos defensores de la libertad. [...] Si una persona se siente inc¨®moda con su atracci¨®n sexual, puede buscar el tipo de tratamiento que desea¡±, explica por escrito Jerzy Kwa?niewski, presidente de Ordo Iuris.
El respaldo a las terapias de conversi¨®n es se?a de identidad de Sharon Slater, presidenta del estadounidense Observatorio Internacional de la Familia (FWI, en ingl¨¦s). Slater es ponente en la cumbre y su organizaci¨®n, entidad colaboradora. En dos estudios sobre el tema ¡ªLa atracci¨®n no deseada hacia personas del mismo sexo puede tratarse con ¨¦xito y Justificacio?n de la oposicio?n a la propuesta de prohibicio?n de las terapias de ¡°conversio?n¡±¨C, el FWI defiende que ser gay o lesbiana puede revertirse con terapia. Un informe del FWI atribuye la retirada de la homosexualidad en 1973 de la lista de ¡°trastornos mentales¡± en EE UU a presiones pol¨ªticas, no a evidencias cient¨ªficas.
La actividad del FWI en ?frica es especialmente controvertida. Dos investigaciones de Open Democracy vinculan al grupo de Slater con el impulso de medidas anti-Lgbi, especialmente en Uganda. En un apartado de su web sobre su papel en este pa¨ªs, el FWI sostiene que lleg¨® en 2022 para trabajar en la prevenci¨®n del sida mediante la ¡°abstinencia sexual¡± y que no ha impulsado la ley hom¨®foba aprobada en 2023, ni tampoco la de Kenia, donde precisamente George Kaluma intenta sacar adelante una norma similar. El FWI afirma que defiende el derecho de las naciones africanas a legislar sobre sexo ¡°de acuerdo con sus propios valores¡±. La entidad no responde a EL PA?S.
Precisamente de Uganda est¨¢ confirmada en la cumbre del lunes la parlamentaria Lucy Akello, una ¡°prominente activista¡± contra los derechos LGTBI, seg¨²n Amnist¨ªa Internacional. En una ¨²nica respuesta gen¨¦rica por escrito a un cuestionario remitido a Akello, la diputada afirma que sus posiciones sobre homosexualidad responden a la ¡°voluntad¡± de sus electores de proteger ¡°sus valores¡±. Y defiende la ley de 2023, que ¡°no apunta¡± a ¡°ninguna persona LGTBI para ser asesinada¡±.
¡°Basura LGTBI¡±
De los nueve miembros de la direcci¨®n de la Red Pol¨ªtica de Valores, siete figuran como ponentes, entre ellos los ya citados Kast (Chile), Mayor Oreja (Espa?a) y Slater (EE UU). A estos se suma un nombre destacado: Brian Brown, presidente de la Organizaci¨®n Internacional para la Familia, entidad estadounidense promotora del Congreso Mundial de Familias, una cita global contra el aborto y el feminismo. El historial de manifestaciones de Brown, que a¨²n en 2020 mostraba su admiraci¨®n por la obra de Vladimir Putin en ¡°asuntos de familia¡±, acredita su rechazo a la ¡°propaganda LGTBI¡±, al ¡°ataque a nuestros cuerpos¡± del ¡°movimiento LGTBI¡± y a la ¡°basura LGTB¡± de las nuevas pel¨ªculas de Disney.
Un informe del Centro Jur¨ªdico contra la Pobreza en el Sur, organizaci¨®n por los derechos civiles en Estados Unidos, denuncia que el Congreso Mundial de Familias no solo ha impulsado medidas anti-LGTBI en ?frica, sino que ha sugerido que la organizaci¨®n terrorista Boko Haram y los defensores de los derechos de los homosexuales conspiran contra los cristianos. Brown no contesta a las preguntas de este peri¨®dico, entre ellas si cree que preside una organizaci¨®n hom¨®foba, por estimarlas tendenciosas.
El portavoz de PNfV, Diego Hern¨¢ndez, confrontado con posiciones recogidas en este texto, sostiene que ¡°lo que une a los miembros y amigos de la Red¡± es el ¡°reconocimiento de la infinita dignidad de todo ser humano¡±. Y a?ade: ¡°La cumbre no es un evento protagonizado ni por extremistas ni por radicales, al contrario. Desde 2014, nuestras cumbres siempre se han realizado en espacios parlamentarios, desde la sede de la ONU en Nueva York hasta el Parlamento Europeo¡±. A partir de este lunes, la Red puede a?adir a su lista la C¨¢mara alta del Parlamento espa?ol.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.