Pena capital contra seis integristas musulmanes en Egipto

"?Que Al¨¢ te congele la sangre!". La maldici¨®n contra el juez militar que ayer conden¨® a muerte a otros seis extremistas musulmanes parti¨® del gent¨ªo y retumb¨® en la sala, resumiendo en pocas pero iracundas palabras la carga de odio que abruma a Egipto. Horas antes, los extremistas isl¨¢micos que han puesto en jaque al Gobierno laico del presidente Hosni Mubarak volvieron a golpear en El Cairo lanzando una bomba contra un puesto de control de la polic¨ªa. El saldo de la jornada: seis islamistas camino M cadalso, dos polic¨ªas y dos civiles heridos de gravedad y la situaci¨®n mucho m¨¢s incierta que la semana anterior.

Distantes han quedado los d¨ªas en los que el Gobierno minimizaba la importancia de los grupos islamistas que desean transformar Egipto en un segundo Ir¨¢n. Mubarak y la Gam¨¢ al Islam¨ªa (Agrupaci¨®n Isl¨¢mica) se han declarado una guerra a muerte, y la sensaci¨®n de seguridad que reinaba en las esferas oficiales hasta hace tan s¨®lo unos meses ya no existe.Las condenas de ayer elevaron a 23 el n¨²mero de integristas egipcios a los que espera la horca. La sesi¨®n fue una repetici¨®n de las ca¨®ticas escenas que se registran continuamente en el vetusto teatro del cuartel de Haekstap, 40 kil¨®metros al norte de El Cairo. Le¨ªdas. las sentencias, una mujer de chador negro tom¨® una silla y destroz¨® dos ventanales. Era la esposa de Ahmed al Sayed, uno de los que ser¨¢n enviados al pat¨ªbulo. Afuera, encerrados en camiones militares y blandiendo copias del Cor¨¢n, los condenados coreaban las consignas que est¨¢n haciendo temblar al pa¨ªs m¨¢s poblado del mundo ¨¢rabe. "?Dios es grande ... ! ?No hay m¨¢s Dios que Al¨¢ ... ! ?Muerte al fara¨®n!".

El juez militar, el general Ahmed Abdula, sentenci¨® a otros tres a penas de entre 10 a?os de c¨¢rcel y cadena perpetua. Dos fueron absueltos. Todos hab¨ªan sido acusados de atentar contra la vida del ministro de Informaci¨®n, Saufat al Sherif, y atacar a turistas extranjeros y polic¨ªas. El ¨²nico sentenciado en ausencia es el supuesto l¨ªder de la c¨¦lula que quiso asesinar al ministro.