El fiscal general serbio quiere ilegalizar el partido del apaleado Vuk Draskovic

El procurador general (fiscal general) de Serbia exigi¨® ayer al Tribunal Constitucional que prohiba el partido de Vuk Draskovic, apaleado por la polic¨ªa el pasado martes. El fiscal acusa al Partido de Renovaci¨®n Serbia (SPO) de instigar las manifestaciones antigubernamentales del martes pasado en Belgrado, que degeneraron en enfrentamientos callejeros, con un saldo de un polic¨ªa muerto y medio centenar de heridos. Vuk Draskovic, l¨ªder del SPO, est¨¢ detenido en la c¨¢rcel Central de Belgrado, desfigurado por las palizas propinadas por la pol¨ªcia, seg¨²n testigos de su partido.

Con la decisi¨®n del fiscal general, las autoridades serbias iniciaron, por primera vez, el procedimiento para la prohibici¨®n de un partido pol¨ªtico, alegando que sus actividades violan la Constituci¨®n. El SPO ha sido en los ¨²ltimos dos a?os el instigador principal, aunque no el ¨²nico, de grandes manifestaciones antigubernamentales.El 9 de marzo de 1991, las concentraciones multitudinarias terminaron con dos muertos, pero no lograron cambiar de r¨¦gimen. En junio de 1992, m¨¢s de 70.000 personas protestaron contra Milosevic sin ¨¦xito alguno. El detenido l¨ªder Vuk Draskovic, si bien ha tenido grandes vacilaciones pol¨ªticas, ha sido el ¨²nico dirigente de la oposici¨®n capaz de movilizar a las masas, aunque no ha mostrado nunca una estrategia pol¨ªtica clara. Por ello, Milosevic orden¨® no s¨®lo su detenci¨®n, sino que permiti¨® que los polic¨ªas le golpearan de camino a la c¨¢rcel.

Draskovic no ha medido sus declaraciones en contra de Milosevic, pero es c¨ªnico decir que su partido haya violado la Constituci¨®n. Seg¨²n indicaron ayer fuentes de su partido, el estado de salud de Draskovic y su esposa, Danica, es grave, y no se permite que les visiten su abogado o un m¨¦dico de confianza.

Eliminar a la oposici¨®n

La petici¨®n de la fiscal¨ªa de prohibir el SPO, uno de los principales partidos de oposici¨®n, con 17 diputados en el Parlamento federal y 27 en el serbio, indica que Milosevic ha decidido eliminar f¨ªsicamente a la oposici¨®n. El caudillo serbio cuenta con los matones ultranacionalistas de Vojislav Seselj, los enormes dispositivos policiales y con la televisi¨®n. Ya no tiene influencia sobre los peri¨®dicos. Pero, eso no le importa: la circulaci¨®n de los cuatro diarios principales de Belgrado apenas alcanza unos 300.000 ejemplares.

Por otra parte, el general Zivota Panic, jefe del Estado Mayor del Ej¨¦rcito yugoslavo, solicit¨®, inesperadamente ayer, a Eric Lars Wahlgren, comandante de las Fuerzas de Protecci¨®n de las Naciones Unidas en la antigua Yugoslavia (Unprofor), la retirada de los observadores internacionales en los aeropuertos militares y civiles en el territorio de Serbia y Montenegro.

El presidente de Serbia, Slobodan Milosevic, ¨²nico hombre al mando en Yugoslavia, tras la destituci¨®n repentina del presidente yugoslavo Dobrica Cosic, el martes pasado, decidi¨® disminuir su cooperaci¨®n con la comunidad internacional. Primero, rechaz¨® la propuesta del Programa de Acci¨®n Conjunta, aprobado en Washington, para permitir el despliegue de los observadores internacionales en la frontera serbio-bosnia. Luego, cancel¨® la hospitalidad a los monitores en los aeropuertos de Yugoslavia, quienes llevan m¨¢s de medio a?o en su puesto.

El general Panic explic¨® que tras la adopci¨®n de la resoluci¨®n 816 de la ONU, que permiti¨® el control del espacio a¨¦reo bosnio para impedir el uso de la aviaci¨®n, "los motivos por los cuales Yugoslavia permiti¨® la llegada de los observadores fueron sustancialmente cambiados". Panic precis¨® que los monitores podr¨ªan permanecer tan s¨®lo en el aeropuerto de Surcin, en Belgrado, y exige su retirada de Berane, Kraljevo, Nis, Batajnica, Pristina y Podgorica.