Yo pecadora

El despecho, la traici¨®n, la venganza, la infamia, el desprecio y la burla en el amor tienen una voz que replica a las ancestrales letras masculinas de los boleros y rancheras. A macho, macha y media. Una mexicana, Paquita la del Barrio, se enfrenta con sus canciones a ese mundo de los bajos fondos que tanto maldijo a la mujer infiel para cantarle sus verdades a los hombres: "Arr¨¢strate a mis rodillas, te quiero ver llorando sangre. Vas a pagar lo que hiciste, lo que llor¨¦ por tu amor aquella tarde. Te aplastar¨¦ como a un gusano y ya despu¨¦s te enterrar¨¦ en el pasado". Y grita: "?Me est¨¢s oyendo, in¨²til?".

Paquita la del Barrio ofreci¨® anoche un aperitivo de lo que ser¨¢ una serie de presentaciones en Madrid, los d¨ªas 10, 11 y 12 en la sala Caracol. Esta mujer rotunda da la cara acabando con el papel de v¨ªctima pasiva de las mujeres en las desdichas amorosas. Y canta: "Tres veces te enga?¨¦ / la primera por coraje la segunda por capricho la tercera por placer".Su repertorio es un tratado de ¨¦tica arrabalera que reboza deliberadamente una exquisita sabidur¨ªa en los t¨®picos y el mal gusto. El p¨²blico que acudi¨® ayer a ver a Paquita la del Barrio en la Casa de Am¨¦rica se entreg¨® desde el primer momento al desgarro de sus letras. Oro negro, la orquesta que la suele acompa?ar, se vio reducida a solo dos m¨²sicos (Jos¨¦ Filem¨®n Guti¨¦rrez al acorde¨®n y Pedro Figueroa a la guitarra el¨¦ctrica) por falta de presupuesto, seg¨²n los organizadores, y eso desluci¨® algo la actuaci¨®n que, por otra parte, gan¨® lo perdido con el entusiasmo de los presentes. Sorprendidos por la violenta pasi¨®n destructora de la cantante, saborearon cada verso aplaudiendo un g¨¦nero para muchos casi desconocido. Algunos pocos latinoamericanos en la sala se preguntaban qu¨¦ asombraba tanto a los espa?oles. Paquita no es ¨²nica, pero es una aut¨¦ntica int¨¦rprete de la m¨²sica popular latinoamericana que, en sus distintas variantes nacionales desgrana las congojas del coraz¨®n con una ret¨®rica de tonos chillones, lentejuelas y bombillas de color.

Hermana del culebr¨®n, la m¨²sica que interpreta esta mujer habla de experiencias vividas entre el humo y el alcohol, entre chulos y cobardes, entre sue?os y llantos. "Te voy a arrancar lo ojos para dejarte entre tinieblas. Te voy a arrancar el alma para que as¨ª a nadie m¨¢s quieras". Mujeres arrastradas por el fango que piden Inv¨ªtame a pecar, que confiesan sus infidelidades y no se arrepienten. Ellas se rebelan: yo soy pecadora, y qu¨¦.