La oposici¨®n triunfa en las legislativas marroqu¨ªes
La forjada entre los dos partidos mayoritarios de la oposici¨®n democr¨¢tica marroqu¨ª -la Uni¨®n Socialista de las Fuerzas Populares (USFP) y el Istiqial- es la virtual vencedora de las elecciones legislativas celebradas el pasado viernes, a pesar de que durante la jornada electoral hab¨ªan denunciado numerosas e importantes irregularidades. Quedan pendientes de elecci¨®n 111 esca?os del Parlamento, que ser¨¢n designados pr¨®ximamente a trav¨¦s del sufragio indirecto. Los grandes perdedores son los partidos llamados oficialistas, que durante los nueve ¨²ltimos a?os han venido gobernando el pa¨ªs.
Aunque la alianza de los socialistas de la USFP y los nacionalistas del Istiqlal es la triunfadora provisional de esta primera vuelta de las elecciones, dif¨ªcilmente podr¨¢n por si solos formar gobierno. Cuentan con un total de 91. esca?os, pero necesitan 163 para obtener la mayor¨ªa parlamentaria., por lo que se ver¨¢n obligados, a buscar el apoyo de otros partidos.Las quintas elecciones legislativas celebradas en Marruecos desde que el pa¨ªs accediera a su independencia en 1956 han supuesto la derrota de los partidos oficiales. As¨ª la Uni¨®n Constitucional, creada en 1983 por el consejero, real Reda Guedira y el ex primer ministro Maati Muabid, ha sufrido un importante descalabro, pasando de los 83 esca?os a los 27.
Una suerte id¨¦ntica ha tenido la Agrupaci¨®n Nacional de los Independientes (RNI) constituido en l9" 78, por el cu?ado del rey Ahmed Osman, quien coalig¨® a todas las candidaturas independientes que hab¨ªan ganado los comicios de un a?o antes.
Este partido, v¨ªctima de una reciente escisi¨®n, ha sido castiga do con la p¨¦rdida de m¨¢s de la mitad de sus esca?os, pasando de 61 a 28. Lo mismo ha pasado con un tercer partido oficialista, el Partido Nacional Dem¨®crata, escindido del anterior en 1981 y que se ha quedado con s¨®lo 14 esca?os, sobre los 24 que gozaba con anterioridad.
Gobierno de coalici¨®n
Se confirman de esta manera los rumores de los mentideros pol¨ªticos rabat¨ªes que en los ¨²ltimos meses ven¨ªan hablando de un gobierno de coalici¨®n formado por socialistas, nacionalistas y los of¨ªcialistas de Ahmed Osman, el cu?ado del monarca. Esta posibilidad, aunque ha sido recientemente excluida por Mohamed Bucetta, el m¨¢ximo l¨ªder del Istiqlal, en tinas declaraciones efectuadas a EL PA?S, sigue consider¨¢ndose como la m¨¢s previsible sobre todo por que cuenta con el apoyo de la Corona. No se descarta sin embargo una posible alianza con los bereberistas moderados del Movimiento Popular, que han obtenido 33 esca?os.
[En una entrevista concedida a la agenicia italiana Ansa y recogida por Efe, Mohamed Bucetta afirm¨® que el futuro Gobierno marroqu¨ª tendr¨¢ que afrontar "con convicci¨®n y decisi¨®n" la cuesti¨®n de los "territorios todav¨ªa no liberados" del reino, en particular Ceuta y Melilla. Bucetta aludi¨® tambi¨¦n a las islas Canarias, pero consider¨® que el estatuto del archipi¨¦lago es "un problema interno del reino de Espa?a". Con respecto al S¨¢hara Occidental, Bucetta expres¨® su confianza en que el refer¨¦ndum de las Naciones Unidas resuelva la actual situaci¨®n.]
Los datos electorales fueron facilitados ayer al mediod¨ªa por el ministro de Informaci¨®n y Turismo, Driss Basri, en una maratoniana conferencia de prensa.
El portavoz gubernamental desminti¨® en esta reuni¨®n que se hubieran cometido importantes irregularidades en el proceso de las elecciones, tal y como hab¨ªan denunciado horas antes miembros de la oposici¨®n democr¨¢tica y portavoces de alg¨²n partido gubernamental.
El ministro Basri explic¨® de manera minuciosa todas las leyes y disposiciones aprobadas y puestas en pr¨¢ctica para asegurar la transparencia de las elecciones, tal y como hab¨ªa ordenado reiteradamente el rey Hassan II en sus mensajes y discursos dirigidos a la Administraci¨®n y a los partidos pol¨ªticos. Reconoci¨®, sin embargo, que como con secuencia de estos resultados se hab¨ªan producido algunos incidentes que calific¨® de algaradas, sin importancia y protagonizados por los que, seg¨²n ¨¦l, "no saben perder".
Dos diputadas
Pero lo m¨¢s importante para el ministro es que el triunfo de la oposici¨®n democr¨¢tica o bloque permite configurar una nueva carta pol¨ªtica en Marruecos y abordar el proceso de liberalizaci¨®n y democratizaci¨®n del pa¨ªs. En esta linea calific¨® como trascedente el hecho de que por primera vez en la historia parlamentaria de Marruecos, dos mujeres han accedido al Parlamento.
Se trata de Fatima Bennani Smires, miembro del comit¨¦ ejecutivo del Istiq1al, de 50 a?os de edad, profesora de Ciencias Humanas por la Universidad de Fez, que se ha convertido en diputada por esta misma ciudad. La otra diputada, es Badia Skali, miembro de la Uni¨®n Socialista, de las Fuerzas Populares, tambi¨¦n profesora de la Universidad en Casablanca.
Un ¨ªndice de partipaci¨®n "realista"
F. S.El ¨ªndice de participaci¨®n en estas elecciones legislativas fue de un 63%, seg¨²n datos oficiales ofrecidos por el ministro de Informaci¨®n e Interior, Driss Basri.
Este ¨ªndice es el m¨¢s bajo que ha registrado Marruecos en las 16 elecciones y referendos celebrados desde 1960. Hay que remontarse a las elecciones municipales de 1967 para encontrar un porcentaje de participaci¨®n similar, ya que en esta fecha no se super¨® el 67%. Con esta tasa de participaci¨®n el proceso electoral marroqu¨ª parece haber iniciado una v¨ªa m¨¢s realista, abandonando as¨ª una cierta propensi¨®n a abultar las cifras, lo que le permiti¨® el pasado mes de septiembre presentar un ¨ªndice del 98% con ocasi¨®n del refer¨¦ndum constitucional. Esta tasa constituy¨® un verdadero r¨¦cord nacional, pero provoc¨® el sonrojo de m¨¢s de un observador pol¨ªtico.
El ministro del Interior asegur¨® ayer que el ¨ªndice de participaci¨®n logrado en estas elecciones puede considerarse elevado y los votantes unos verdaderos h¨¦roes, ya que se hab¨ªan visto obligados a sortear m¨²ltiples obst¨¢culos administrativos para llegar hasta las urnas.
Pero estos obst¨¢culos, a?adi¨® el ministro, estaban as¨ª dispuestos y pactados para poder asegurar la transparencia de las elecciones.
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