Guerra pierde su segundo asalto contra Gonz¨¢lez

El sector guerrista fracas¨® ayer en su segundo desaf¨ªo al secretario general del PSOE. Un total de 87 diputados dieron su voto a Carlos Solchaga, avalado por Felipe Gonz¨¢lez, para presidir el grupo parlamentario. Los guerristas plantearon como alternativa a Eduardo Mart¨ªn Toval, quien obtuvo 66 votos. Otros cinco diputados votaron en blanco, y uno emiti¨® un voto nulo. El parlamentario Francisco V¨¢zquez defendi¨® la alternativa de Eduardo Mart¨ªn Toval, y lo hizo como protesta "contra toda la ejecutiva, por haber tra¨ªdo un candidato con una votaci¨®n de 15 a 13, que rompe la cultura de pacto del PSOE". Los guerristas, que daban por perdida la votaci¨®n desde el principio, acabaron satisfechos, ya que obtuvieron m¨¢s votos de los que preve¨ªan.

El ministro del Interior, Jos¨¦ Luis Corcuera, y el secretario general de Castilla-La Mancha, Juan Pedro Hern¨¢ndez Molt¨®, pidieron que se retirara la candidatura alternativa, pero no tuvieron ¨¦xito. Gonz¨¢lez acogi¨® la situaci¨®n con normalidad: "Soy un dem¨®crata y, por tanto, no importa que un amigo entra?able como Paco V¨¢zquez haya presentado otra candidatura".Despu¨¦s de varias horas de tens¨ª¨®n, los protagonistas dieron muestras de gran tranquilidad. El derrotado, Eduardo Mart¨ªn Toval, se?al¨® que lo ocurrido constitu¨ªa "un gran ensayo democr¨¢tico" y anunci¨®: "A partir de ahora, los diputados del PSOE actuar¨¢n como una pi?a en torno al Gobierno". La ministra de Asuntos Sociales, Matilde Fern¨¢ndez, guerrista convencida, declaraba: "Los 159 diputados del PSOE estamos a las ¨®rdenes de Solchaga". ?ste, a su vez, promet¨ªa "conciliaci¨®n" y una "comunicaci¨®n perfecta" entre el grupo parlamentario y el Gobierno.

Irritaci¨®n

Otro era, sin embargo, el clima que se respiraba en las filas guerristas y renovadoras. Entre los primeros, algunos, profundamente irritados, comentaban la intervenci¨®n de Gonz¨¢lez previa a la votaci¨®n: "Que conste que es la prirnera vez que propongo a alguien para el grupo parlamentario". Estas palabras del secretario general fueron interpretadas en este sector como muestra de su nula predisposici¨®n al di¨¢logo y su tendencia a la imposici¨®n. Guerra guard¨® silencio.Los renovadores, en cambio, calificaron de "¨ªrresponsabilidad" el hecho de presentar una propuesta diferente a la del secretario general.

El tenor de las intervenciones de unos y de otros puso de manifiesto estas dos tesis. A las cinco de la tarde, la sala internacional del Congreso de los Diputados estaba abarrotada de diputados socialistas y la tensi¨®n se apreciaba en los comentarios de unos y otros. Felipe Gonz¨¢lez conoc¨ªa ya de antemano que iba a haber una candidatura alternativa, y que iba a ser su viejo amigo Paco V¨¢zquez, alcalde de La Coru?a, quien la presentara.

La intervenci¨®n del edil fue muy medida y empez¨® por responsabilizar a toda la Comisi¨®n Ejecutiva Federal de "haber roto la cultura de consenso del partido". Con estas palabras recordaba que, en la ejecutiva del viernes, Solchaga fue designado como propuesta por 15 votos a favor y 13 en contra. V¨¢zquez aprovech¨® para criticar "el tipo de pol¨ªtica que se hace en Madrid" y se sac¨® la espina que llevaba dentro por el hecho de que la renovaci¨®n se haya llevado por delante al portavoz de los socialistas en el Senado, el gallego Jaime Barreiro, a pesar de contar con el reconocimiento general de que ha hecho una buena gesti¨®n.

Antes que V¨¢zquez habl¨® Felipe Gonz¨¢lez unos breves instantes para presentar la candidatura que consideraba "id¨®nea", sin m¨¢s honduras. En la defensa de la candidatura de Mart¨ªn Toval se situaron Miguel ?ngel Mart¨ªnez, Javier S¨¢enz Cosculluela y Carlos Sanju¨¢n. Para apoyar la propuesta del secretario general hablaron Joaqu¨ªn Almunia, Luis Y¨¢?ez, Juan Pedro Hern¨¢ndez Molt¨®, Alfonso Lazo y Mercedes Aroz. Manuel de la Rocha, de Izquierda Socialista, se abstuvo, pero dej¨® claro que Solchaga no era la persona adecuada para llevar a cabo el acercamiento con Izquierda Unida y los sindicatos, ya que representa al ala social-liberal del PSOE".

Luis Y¨¢?ez fue preciso: "Felipe Gonz¨¢lez ha ganado las elecciones, y votar en contra de su propuesta ser¨ªa torcer el mensaje electoral". Carlos Sanju¨¢n, secretario general de los socialistas andaluces, recogi¨® el guante y se pregunt¨® qui¨¦n hab¨ªa ganado realmente las elecciones, al tiempo que se?alaba que el triunfo no es de una persona, sino de un partido con una persona al frente. El ex ministro Joaqu¨ªn Almunia hizo alusi¨®n al momento dificil en el que los socialistas se encontraban en relaci¨®n a su responsabilidad de gobierno y pidi¨® el apoyo a Felipe: Gonz¨¢lez porque es quien, en su opini¨®n, aglutina a todos los socialistas.

10 'fugas' guerristas

Al final fue el propio Gonz¨¢lez el que anim¨® a que se pasara a la votaci¨®n, con el resultado de 87 votos para Solchaga, 66 para Mart¨ªn Toval, cinco en blanco y uno nulo. Por tanto, el ministro de Econom¨ªa en funciones result¨® elegido presidente del grupo; Jos¨¦ Mar¨ªa Mohedano, secretario general, y Carlos L¨®pez Ria?o, secretario general adjunto. Despu¨¦s de este acto se someti¨® al grupo la propuesta para el Senado, con estos tres nombres: Bernardo Bayona, Santiago P¨¦rez Garc¨ªa y Alfonso Garrido ?vila. No hubo que votar. Se nombraron por aclamaci¨®n, en un intento de camuflar la evidencia: con el segundo asalto de ayer, los dos sectores del PSOE saben perfectamente que la guerra est¨¢ ya declarada y que la soluci¨®n s¨®lo la tiene la celebraci¨®n de un congreso.

Los renovadores estaban muy satisfechos con la votaci¨®n porque, a su juicio, pon¨ªa de manifiesto que en un congreso de partido los guerristas saldr¨ªan derrotados. Los partidarios de Alfonso Guerra, por su parte, aseguraban que la votaci¨®n respond¨ªa a sus expectativas, aunque calculaban que 10 de los suyos hab¨ªan votado al candidato de Felipe Gonz¨¢lez.