Nacho Duato estrena ballets sobre 'El Cid' y 'El Pelele'

El bailar¨ªn argentino Julio Bocca cambi¨® de traje varias veces anteayer en el primer ensayo general de Los divinos en la plaza Mayor de Madrid, y, con un fuerte resfriado, tuvo que desvestirse sobre el amplio escenario de la plaza Mayor. No hubo, sin embargo, el calor habitual de esta ¨¦poca del a?o, y por toda la plaza casta?eteaban los dientes de m¨¢s de 150 bailarines dispuestos a una dificil prueba tanto en lo t¨¦cnico como en lo art¨ªstico.

El ensayo general de Los divinos no fue una prueba ordinaria. Hab¨ªa nervios y sonrisas, un mar de cables por el suelo y, sobre todo, gente que se quejaba del fr¨ªo y del fuerte viento mesetario: "Un imponderable que no nos detiene en lo absoluto. El aire se oye aqu¨ª, en la plaza, pero, por fortuna, la t¨¦cnica de la retransmisi¨®n televisiva anula esa interferencia de la madre naturaleza", apunta sin perder el humor la productora Vittoria Cappelli.Entre otros detalles de las muchas incidencias de tan compleja coordinaci¨®n, los bailarines cl¨¢sicos Julio Bocca y Eric Vu An se quejaban del suelo pintado del escenario, pero por razones opuestas: mientras para el argentino estaba como una lapa y sus zapatillas se pegaban, para el franc¨¦s parec¨ªa una pista de hielo por la que temiera escurrirse en el momento menos oportuno.

Vittoria Ottolenghi, guionista del programa, con una ben¨¦vola sonrisa de quien regresa de mil batallas similares, dice: "Encontraremos el t¨¦rmino medio. Si el escenario se friega con coca-cola dos horas antes de bailar, se consigue la superficie ideal para contentar a unos y otros". Otro experto apunt¨® entonces que el misterio est¨¢ en la proporci¨®n de la bebida con cafe¨ªna que se administra al cubo de la fregona. El ruso Yuri Klevtsov ensaya sin opinar, en un silencio que m¨¢s parece ser una consecuencia de la barrera del idioma.

Nacho Duato, con muy buen talante en su doble vertiente de bailar¨ªn principal y core¨®grafo, tambi¨¦n tuvo una jornada dur¨ªsima, pues bail¨® a fondo y dirigi¨® a sus chicos en dos creaciones: una sobre El pelele y otra inspirada en El Cid, que han despertado elogiosos comentarios de organizadores y curiosos.

Cuando parec¨ªa que el ensayo hab¨ªa terminado, una voz autoritaria retumb¨® por la megafon¨ªa: "Quiero ver de nuevo todo el final", y todo el mundo volvi¨® a ponerse en su sitio.

Julio Bocca, que ya hab¨ªa cambiado su traje de Don Quijote por playeras y vaqueros despu¨¦s del disfraz de un Sancho tierno y enmascarado, regres¨® resignado hasta su puesto: "Llevo todo el d¨ªa en danza y no he probado bocado". Poco antes, tras un espectacular strip tease, Bocca se visti¨® de rigurosa etiqueta junto a Alessandro Gassman, que hace las veces de presentador, y a toda la plantilla masculina de danzarines, donde, entre otros, como donjuanes actuales, brillaron Nacho Duato, Antonio M¨¢rquez, Joaqu¨ªn Cort¨¦s e Igor Yebra, la ¨²ltima revelaci¨®n del ballet espa?ol que dice: "Lo del esmoquin me ha cogido por sorpresa. Dicen que estamos elegant¨ªsimos, pero me siento dentro de un cors¨¦".