Agricultura almacena en Madrid 20.000 semillas congeladas

El banco de germoplasma del Centro de Recursos Fitogen¨¦ticos, que el Ministerio de Agricultura tiene en Madrid, ha pasado de guardar muestras de 241 plantas en 1977, a?o en que se cre¨®, a las actuales 20.473. Las semillas esperan, a 18? cent¨ªgrados bajo cero, a que alg¨²n d¨ªa los investigadores las saquen de la gran nevera, las hagan germinar, y utilicen sus genes en la mejora de las especies vegetales. Este banco de germoplasma alberga en peque?os frascos miles de caracter¨ªsticas vitales de cereales y leguminosas sobre todo.Cada cuatro a?os los especialistas del centro se re¨²nen para determinar cu¨¢les son las semillas que por su valor merecen ser guardadas en el banco. La variedad de caracter¨ªsticas gen¨¦ticas, seg¨²n los expertos, es imprescindible para mejorar las especies vegetales al permitir crear otras nuevas en las que se combinan los mejores rasgos de cada planta. Precisamente esa variedad biol¨®gica las har¨¢ m¨¢s resistentes frente a plagas u otras circunstancias adversas.

Evoluci¨®n hist¨®rica

Los responsables del centro explican que en ¨¦pocas pasadas exist¨ªa una gran diversidad de razas de trigo, de ma¨ªz y de todas las plantas que han sido utilizadas tradicionalmente por el hombre. Esta diversidad se ha ido perdiendo porque en todo el mundo se est¨¢n sembrando las mismas semillas: las m¨¢s productivas. Las nuevas y mejoradas variedades desplazan a las viejas, las plantas menos rentables ya no se siembran, son relegadas y corren el peligro de desaparecer.Rafael Pons, director del centro, advierte que no se sabe c¨®mo evolucionar¨¢ el planeta. "Puede ser", dice, "que las mejores plantas de hoy tengan que enfrentarse en a?os venideros a condiciones para las que no est¨¢n preparadas y para las que sus parientes s¨ª tienen defensas. Por eso, los patitos feos de ahora pueden en el futuro resolver muchos problemas".

El banco de germoplasma recolecta, almacena, intercambia y registra semillas de especies no comerciales. Eval¨²a sus caracter¨ªsticas y las integra a un sistema de documentaci¨®n que permite conocer con exactitud cada rasgo de las muestras guardadas.

Para mantener vivas las semillas durante decenas de a?os es necesario someterlas a un proceso que garantiza su futura germinaci¨®n. El proceso se inicia con la limpieza de las semillas y la selecci¨®n de las mejores muestras a las que despu¨¦s se les aplica una prueba de germinaci¨®n para comprobar que pueden convertirse en plantas. Si pasan el examen, se introducen en una c¨¢mara de desecaci¨®n que reduce el contenido de agua que tienen generalmente de un 17% a un 7% o un 5%. Una vez deshidratadas, se envasan y se guardan en la c¨¢mara a 2? bajo cero, cuando se prev¨¦ una utilizaci¨®n a corto plazo, o a 18? bajo cero si se prev¨¦ un periodo m¨¢s largo.