El pr¨ªncipe Alois de Liechtenstein y la duquesa Sophia de Baviera

contrajeron matrimonio ayer en la iglesia de San Flor¨ªn de Vaduz, la capital del Principado. La boda se ha celebrado cinco meses despu¨¦s de que el pr¨ªncipe Alois, de 25 a?os, heredero del trono de este peque?o enclave, hiciera p¨²blico su compromiso con la duquesa Sophia de Baviera, un a?o mayor que su ya esposo. A la ceremonia, por la que se unen dos dinast¨ªas europeas hist¨®ricas -cuyas ra¨ªces se remontan al siglo XII- aunque con escaso peso en el mundo actual, asistieron, entre otros miembros de casas reales, el pr¨ªncipe Felipe de Borb¨®n y el pr¨ªncipe Alberto de M¨®naco. El heredero del trono espa?ol se encontr¨® tambi¨¦n con una vieja amiga entre el selecto plantel de invitados: la hija del marqu¨¦s de Mari?o, Isabel Sartorius. La boda estuvo precedida por una deslumbrante fiesta celebrada en el castillo de Vaduz, como no pod¨ªa ser menos trat¨¢ndose de un enlace de estas caracter¨ªsticas. Con esta boda, el pr¨ªncipe de Liechtenstein, Hans Adam II, ve cumplidos sus deseos de mantenimiento de unos v¨ªnculos hist¨®ricos con la casa de Baviera. La duquesa Sophia es la primog¨¦nita del duque Alberto de Wittelsbach. El enlace de Liechtenstein se produce dos d¨ªas despu¨¦s de la boda de Kubrat de Bulgaria celebrada en Madrid y a la que asisti¨® la reina de Espa?a.