Orden de desalojo contra una mujer que entr¨® en un piso social abandonado

Carmen Tena, de 46 a?os, y tres de sus cinco hijos abandonaron ayer voluntariamente la vivienda social que hab¨ªan okupado 15 d¨ªas antes en el madrile?o barrio de Hortaleza. Los polic¨ªas que fueron a desalojarla no Regaron a usar la fuerza. Seg¨²n los vecinos, hace m¨¢s de 11 a?os que el piso -de 40 metros cuadrados- est¨¢ deshabitado, y Carmen, que lleva viviendo 15 a?os de prestado en casa de una vecina, decidi¨® okuparlo. La necesidad le empuj¨®, pues en el hogar de su vecina, de igual tama?o que el piso en el que entr¨®, se hacinan 14 personas.

Una an¨®nima llamada vecinal alert¨® al due?o del piso okupado (el n¨²mero 1824 de la calle de la Abertura), quien se apresur¨® a denunciar a Carmen por allanamiento de morada.Seg¨²n los vecinos, el adjudicatario del piso, T. L. M., no vive en ¨¦l desde hace casi 12 a?os. Afirman tambi¨¦n que lo ha cedido por unas 400.000 pesetas al matrimonio formado por Emilio T. G. y T. N., lo que ser¨ªa ilegal por tratarse de una vivienda protegida y adjudicada, del Instituto de la Vivienda de Madrid (Ivima). EL PA?S intent¨® ayer, sin ¨¦xito, obtener informaci¨®n del Ivima.

Carmen cuenta que la mujer a la que se cedi¨® el piso junto a su marido se present¨® en la vivienda okupada al poco tiempo de que ella se instalase y la urgi¨® a abandonarlo, pues de lo contrario la echar¨ªa. La mujer se encontraba ayer en el piso en discordia, ante el que se hab¨ªan concentrado numerosos veci. nos, pero no quiso hablar.

Mientras, Carmen, madre soltera, a quien okupar la vivienda le ha costado su trabajo de asistenta porque no quer¨ªa abandonar ni un momento su nueva casa, ha vuelto al piso de Remedios Fern¨¢ndez, la vecina que la acogi¨® hace ya 15 a?os. Pero piensa recurrir la orden de desalojo y est¨¢ dispuesta a pegar la patada de nuevo. "Si el piso sigue vac¨ªo dentro de tres d¨ªas, me meto", afirma.

Asistentes sociales de la Junta Municipal del distrito de Hortaleza y la organizaci¨®n ben¨¦fica C¨¢ritas la asesoran para que solicite un piso al instituto de la vivienda dependiente de la Comunidad de Madrid. "Pero no puede estar en situaci¨®n ilegal si quiere que le den uno", dice Josefa Miguel, una de las trabajadoras sociales que se ocupa del caso.

Los vecinos est¨¢n de su parte y recogen firmas para que se le busque un hogar digno. Les irrita que esto suceda en un barrio donde, seg¨²n ellos, "muchos pisos est¨¢n vac¨ªos y sus due?os tienen otras viviendas".