"No subordinar¨¦ el pacto global sobre la justicia a mis ideas personales"
La trayectoria democr¨¢tica de Juan Alberto Belloch y su defensa permanente de los derechos humanos no ofrecen dudas a quienes conocen a este juez de 43 a?os, turolense recriado en Barcelona y afincado como magistrado en el Pa¨ªs Vasco. Quienes han coincidido con ¨¦l en la asociaci¨®n Jueces para la Democracia y admiran su vocaci¨®n pol¨ªtica, se asombran poco de la presencia de Belloch en el Gobierno, al que ha saltado desde el trampol¨ªn del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y en el que pretende protagonizar un gran pacto de todos los sectores jur¨ªdicos.Pregunta. Usted ha declarado como prioridad ampliar las competencias del CGPJ, lo contrario de lo que hizo Fernando Ledesma, otro magistrado que tambi¨¦n pas¨¦ del ¨®rgano de gobierno del poder judicial al Ejecutivo socialista. ?No hay riesgo de que, como ministro, usted modifique su visi¨®n de las cosas?
Respuesta. Asumo ¨ªntegramente el documento del CGPJ sobre ampliaci¨®n de competencias, cuyo contenido presentar¨¦ al Consejo de Ministros. La decisi¨®n ¨²ltima corresponde al Parlamento.
P. ?El CGPJ contar¨¢ con la selecci¨®n de los jueces este mismo a?o?
R. Lo que yo garantizo es que el 15 de septiembre se constituir¨¢ la comisi¨®n encargada de esa primera reforma de la ley org¨¢nica del Poder Judicial y se empezar¨¢ a trabajar en esa direcci¨®n. Para m¨¢s adelante quedar¨¢ una reforma m¨¢s amplia, sobre la que tambi¨¦n se trabajar¨¢ inmediatamente, pero en la que es l¨®gico pensar que tarde m¨¢s en producirse el consenso. Por eso separamos lo m¨¢s f¨¢cil, primero, y lo m¨¢s complejo, despu¨¦s. En todo caso, mi compromiso es iniciar el proceso, pero no quiero que se crea que soy un superm¨¢n que puedo arreglarlo todo.
P. ?Puede ponerle plazo a la instauraci¨®n del Jurado?
R. Para m¨ª es urgente, pero no depende s¨®lo de m¨ª. El 15 de septiembre presentar¨¦ un proyecto a esa comisi¨®n. Como se trata, adem¨¢s, de un asunto muy elaborado y estudiado, yo creo que puede hacerse r¨¢pidamente. Lo que yo pretendo es que la ley del Jurado se integre en un pacto global de reformas urgentes. Pero si tal reforma se empantana, promovor¨¦ una ley del Jurado, con las reformas imprescindibles para que el jurado funcione.
P. A partir de ahora, ?los edificios judiciales van a tener en cuenta la existecia del futuro jurado?
R. Por supuesto.
P. El tiempo de realizaci¨®n de ese pacto global, ?en cu¨¢nto lo calcula?
R. Yo he planteado al Consejo de Ministros que necesito cuatro meses para replantear el C¨®digo Penal. Esos cuatro meses van a ser cruciales y, desde luego, si se aprovechan bien, junto al C¨®digo Penal deber¨ªa ir el paquete de medidas anexas, incluida la ley del Jurado y la reforma procesal penal vinculada a ambas leyes.
P. De todas las propuestas que mantiene, ?cu¨¢l le obligar¨¢ a dimitir si el Gobierno no la asume?
R. Creo que eso mismo me lo ha preguntado mi mujer, y mi hijo [de 17 a?os]. Le digo como a ellos: dimitir¨¦ ante todo aquello que vaya contra la forma que tengo de entender los derechos humanos. Mi trayectoria profesional y personal es muy lineal en la defensa a ultranza de los derechos humanos.
P. Pero si el Gobierno no asume el paso al CGPJ de la selecci¨®n de los jueces, la reforma procesal o la ley del Jurado, ?qu¨¦ pasar¨¢?
R. Llevo varios a?os reclamando la selecci¨®n para el Consejo. Me parece simplemente imposible que eso se pudiera bloquear, entre otras cosas porque est¨¢ en el programa del PSOE. En ese campo concreto, creo que se me va a apoyar. De lo contrario, no entender¨ªa para qu¨¦ se me ha hecho ministro. Yo no he sido nunca clandestino. Mis ideas est¨¢n ah¨ª. Creo que se me ha hecho ministro de Justicia, sustancialmente porque lo que he venido sosteniendo debe de parecerle adecuado al presidente del Gobierno. Eso no quiere decir que mis propuestas se acepten al 100% por el Gobierno y el Parlamento. Pero est¨¢ claro que no tendr¨ªa sentido seguir si se decidiera que no hay que hacer reforma procesal, o que no hay que reformar la ley org¨¢nica del Poder Judicial, etc.
P. ?Qu¨¦ medios va a aplicar para atajar la lentitud de la justicia?
R. En una situaci¨®n de crisis econ¨®mica y de previsible recorte presupuestario, es muy dif¨ªcil pensar en reformas que impliquen alto coste econ¨®mico. Pero la lentitud no s¨®lo se resuelve con dinero. Por ejemplo, hay que potenciar los juicios r¨¢pidos, que tan buen juego dieron en Barcelona; promover equipos volantes de apoyo para resolver situaciones concretas de atasco; agilizar la ejecuci¨®n de las condenas a la Administraci¨®n...
P. ?Qu¨¦ har¨¢ usted para que la Administraci¨®n no siga pleiteando contra el criterio jurisprudencial consolidado, uno de los motivos del atasco judicial?
R. Dar instrucciones espec¨ªficas al Servicio Jur¨ªdico del Estado, que depende de esta casa. Ser¨¢ la primera instrucci¨®n pol¨ªtica que dar¨¦ al director general, porque eso es verdad que no cuesta dinero y debe hacerse ya.
P. ?Va a proponer al Gobierno ampliar la despenalizaci¨®n del aborto seg¨²n la ley de plazos?
R. S¨ª, en la l¨ªnea de lo que defend¨ª desde el CGPJ.
P. El anterior ministro ten¨ªa dudas sobre la constitucionalidad de esta ampliaci¨®n.
R. Dudas perfectamente razonables, pero que yo no tengo.
P. La v¨ªa penal ?va a quedar definitivamente exclu¨ªda para corregir los excesos de los periodistas?
R. Va a quedar como ¨²ltimo remedio para casos extremos de contumacia consciente en el desprecio a la verdad o en la falta de diligencia.
P. ?Prev¨¦ alguna novedad en materia de tratamiento a los presos?
R. Hay que garantizar el tratamiento individualizado de toda la poblaci¨®n reclusa.
P. Usted consigui¨® en el CGPJ un acuerdo a favor de la creaci¨®n de un defensor p¨²blico, como alternativa a los abogados de oficio, no siempre eficientes para la gratuidad de la justicia. ?Pondr¨¢ ahora en pr¨¢ctica esa idea?
R. Mi planteamiento general es el siguiente: yo sigo teniendo mis ideas, pero no supeditar¨¦ a ellas el objetivo del pacto global sobre la justicia. Las ideas del ministro no son lo m¨¢s importante, ni mucho menos, y no har¨¦ nunca reformas fuera de ese marco global o subordinadas a mis ideas.
P. Pero parece l¨®gico que intente realizar ideas que considera razonables.
R. S¨ª, pero siempre desde la ¨®ptica del pacto. Si resulta que una idea m¨ªa bloquea la posibilidad del pacto, no la voy a sostener a ultranza.
P. El llamamiento a la participaci¨®n en un mismo proyecto global de jueces, fiscales, abogados, procuradores, notarios, registradores, secretarios judiciales -algunos de ellos con intereses contrapuestos- plantea la interrogante de si lo corporativo puede aunarse en beneficio de los ciudadanos...
R. Esa es una pregunta muy dif¨ªcil. El l¨ªmite evidente para el ministro de Justicia es que en modo alguno los intereses corporativos pueden predominar sobre los intereses p¨²blicos, a los que tienen que estar subordinados los primeros. El ministro de Justicia no se apoyar¨¢ nunca en el corporativismo que, como tal, es un mal, y todo lo contrario de la participaci¨®n. En cuanto a los intereses contrapuestos entre unos y otros sectores, creo que si en una misma mesa est¨¢n sentados todos, se ir¨¢n depurando los aspectos que responden a posiciones corporativas. Hay que crear las condiciones en las cuales los argumentos tengan que sostenerse con transparencia y contradicci¨®n, en lugar de que cada uno acuda al ministro de Justicia a explicar sus particulares planteamientos. La obligaci¨®n de esta casa es crear ese clima de di¨¢logo.
P. ?Habr¨¢ paz entre los ministerios de Justicia e Interior?
R. Me parecer¨ªa lamentable que se reprodujera cualquier tipo de tensiones. Lo sensato es no crear pol¨¦micas artificiales ni descargar culpas unos poderes sobre otros. Desde luego, no ser¨¦ yo el que empiece con descalificaciones ni cr¨ªticas ni a los jueces ni a los altos cargos. Mis criterios los mantendr¨¦ en el Consejo de Ministros, pero no entrar¨¦ en la pol¨¦mica que algunos me auguran.
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