V¨ªspera de nada

Los inversores mantienen su atenci¨®n repartida entre varios frentes -m¨¢s por la costumbre de diversificar que por lo que ¨¦stos puedan aportarles de nuevo- y ayer todos ellos mostraban una calma absoluta que no invitaba, precisamente, a la actividad. El esfuerzo se vio limitado por circunstancias ambientales, lo cual es de agradecer en un momento en el que el propio mercado carece de ideas sobre lo que el futuro, incluso a corto plazo, puede deparar. Una crisis econ¨®mica que tiene la suerte de contar con un cambio de Gobierno para refrescar ideas y aportar soluciones hab¨ªa despertado cierto inter¨¦s, pero la inversi¨®n no hab¨ªa contado con el ritmo palaciego que la pol¨ªtica impone a las cosas de andar por casa. Las soluciones que se esperaban por ese ladodeber¨¢n esperar un tiempo -el de la siesta, opinan por el parqu¨¦- lo cual deja al mercado las manos libres para actuar seg¨²n sus propias posibilidades. Para el an¨¢lisis fundamental, ¨¦stas son escasas y de complicada ponderaci¨®n a medio plazo, mientras que el chartismo se limita a constatar la estancia del ¨ªndice dentro de eso que se define como movimiento lateral y que en t¨¦rminos coloquiales significa una. ausencia total de alicientes e intenciones.El volumen negociado en esta sesi¨®n no es el m¨ªnimo del a?o, pero promete, ya que apenas se recaudaron 11.000 millones. En el exterior s¨®lo destacaba la subida de Francf¨®rt, que rompe el 1.820 y entra en fase de subida libre. Madrid perdi¨® un 0, 10% y el Ibex 35 ced¨ªa un 0,29%.