'Responderemos a las agresiones contra los 'cascos azules"
Est¨¢ al mando de la Fuerza de Protecci¨®n de las Naciones Unidas en la antigua Yugoslavia (Unprofor) desde hace un mes. El general franc¨¦s Jean Cot cree necesario el env¨ªo de m¨¢s efectivos. La misi¨®n entra?a riesgos, como lo demuestran los ataques contra los cascos azules. Pero Cot asegura que no se resignar¨¢n y responder¨¢n a las agresiones deliberadas.
ENVIADO ESPECIAL Tiene bajo su responsabilidad un contingente de 25.000 cascos azules, repartidos por toda la antigua Yugoslavia. El general franc¨¦s Jean Cot no duda en afirmar que si prosperan las negociaciones de paz de Ginebra har¨¢n falta muchos m¨¢s soldados al servicio de la ONU para garantizar los eventuales acuerdos de paz. "Al margen de Ginebra, la ONU necesita enviar ya 7.500 cascos azules m¨¢s para aplicar sus propias resoluciones, como la 836 [referida a la calificaci¨®n de seis enclaves musulmanes como zonas protegidas]. Es decir, doblar la cifra actual".
. En¨¦rgico y diplom¨¢tico a un tiempo, el general Cot es el comandante en jefe de 16.500 cascos azules desplegados en Croacia, 7.500 en Bosnia-Herzegovina y alrededor de 1.000 en Macedonia. Jean Cot sustituy¨® en el cargo al sueco Eric Lars-Wahlgren. "Hemos pedido", se?ala, 11 a los distintos pa¨ªses que contribuyen con tropas a las misiones de paz que aporten nuevos efectivos. Estamos esperando las respuestas". Preocupado por la posibilidad de que una partici¨®n de Bosnia convierta esta guerra en una lucha de guerrillas, el general franc¨¦s se?ala: "Tengo miedo de c¨®mo pueden afectar las soluciones pol¨ªticas a la evoluci¨®n militar sobre el terreno".
Como al resto de responsables militares de Unprofor, Cot es consciente de que la cadena de mando no funciona en los distintos bandos en conflicto en Bosnia y subraya de modo muy gr¨¢fico: "En esta guerra hay de todo. Fuerzas que son herederas del antiguo Ej¨¦rcito de Yugoslavia, milicias formadas para la guerra y tambi¨¦n grupos incontrolados, tanto entre los serbios como entre los croatas y los musulmanes. Esta situaci¨®n a?ade muchas dificultades a nuestro trabajo de pacificaci¨®n, porque nunca estamos seguros de si las agresiones y los obst¨¢culos a la tarea de Unprofor proceden de unidades regulares o de elementos sin control".
Cot visit¨® el pasado lunes a los legionarios espa?oles que resultaron heridos la pasada semana en la base avanzada de Jablanica y estuvo en los campamentos espa?oles en Dracevo y en Medjugorje. Tras destacar la buena labor que est¨¢n realizando las tropas espa?olas en Bosnia, Cot entristece la voz para comentar: "Cuando un pa¨ªs env¨ªa soldados a una misi¨®n de paz adquiere un compromiso que no es ninguna fiesta. Aparte del bombardeo contra los espa?oles la semana pasada se registraron tambi¨¦n ataques contra el batall¨®n franc¨¦s en Sarajevo. Hemos de aceptar de antemano las posibles p¨¦rdidas humanas, pero eso no quiere decir que nos resignemos. Responderemos siempre que podamos a las agresiones deliberadas contra las tropas de Unprofor. Pero en el caso de Jablanica no sab¨ªamos ni sabemos el origen del bombardeo".
Jean Cot admite que la comunidad internacional ha marchado a la zaga de los acontecimientos desde que comenzaron los conflictos en la antigua Yugoslavia y define la guerra en los Balcanes como un rodillo que va aplastando los territorios desde el norte en direcci¨®n al sur. Primero estall¨® el conflicto en Eslovenia, m¨¢s tarde en Croacia y en la actualidad devasta Bosnia-Herzegovina.
Por tanto, evitar una previsible extensi¨®n de la guerra hacia Kosovo, la provincia serbia de poblaci¨®n muy mayoritariamente albanesa, o hacia Macedonia figuran entre las prioridades del comandante en jefe de Unprofor. "Por primera vez", comenta orgulloso, "creo que nos hemos anticipado al estallido de otros conflictos. Esto nos permite detectar las tensiones antes de que puedan degenerar en una guerra. De momento, ya cuento con un millar de cascos azules desplegados en Macedonia que proceden en su mayor parte de los pa¨ªses escandinavos y de Estados Unidos".
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