Notas y selectividad

Dice Ismael D¨ªaz Bermejo en Cartas al director que "no sabe de qu¨¦ se asombra nadie" ante la denuncia hecha por ?ngel Fern¨¢ndez Herrero de irregularidades -vulgo, cambalache de notas- en un tribunal de selectividad de la Complutense. Acto seguido relata -tambi¨¦n sin ¨¢nimo de sorprender, supongo- que como miembro de esos tribunales ha asistido impasible al mismo tipo de mercader¨ªas.Uno, que como profesor de la Complutense pudo en una ocasi¨®n verificar personalmente -no impasible, sino at¨®nito- que semejante indecencia se produc¨ªa en las actas finales de su asignatura, se asombr¨® lo suficiente como para denunciarlo y no se arrepiente de haberse ganado con ello la antipat¨ªa, contundentemente traducida en diversas tropel¨ªas y abusos de poder que no es cosa de resaltar ahora, de ciertos sujetos de mucho respeto, pero muy poco respetables.

Tiene raz¨®n al dudar de la efectividad de las denuncias. El agravio a los alumnos, aprobados o no, que tienen que tomarse la molestia de estudiar suele subsanarse gracias a ellas; pero la impunidad de estos trileros de la calificaci¨®n -que con sus ma?as demuestran en cu¨¢nto estiman su trabajo- parece estar hasta la fecha garantizada. As¨ª llueven rayos y truenos sobre la cabeza del denunciante, que es lo ¨²nico que le preocupa a don Ismael y es la raz¨®n por la que no denuncia nada. Para los alumnos que no han sabido buscarse su padrino, sus ¨²ltimas y conmovedoras palabras: "Lo siento, pero as¨ª son las cosas".

Mi m¨¢s profunda simpat¨ªa a ?ngel Fern¨¢ndez Herrero; en cuanto a Ismael Garc¨ªa, ?qu¨¦ vamos a decirle a quien tan bien sabe velar por sus propios intereses?.-

Profesor de la Facultad de Ciencias Pol¨ªticas y Sociolog¨ªa de la Universidad Complutense.