Una bomba del IRA mata a nueve personas en Belfast

El Ej¨¦rcito Republicano Irland¨¦s (IRA) se responsabiliz¨® ayer de un atentado que caus¨® nueve muertos, incluyendo a dos ni?as, y 57 heridos en la ciudad de Belfast. Una bomba de gran potencia hizo explosi¨®n en un barrio comercial de la capital norirlandesa donde miles de ciudadanos efectuaban sus compras del fin de semana. El responsable de la polic¨ªa local, Ronnie Flanagan, asegur¨® que el ataque fue perpetrado por "gente dispuesta a asesinar". En un comunicado inicial, el IRA aseguraba que el atentado iba dirigido contra el grupo paramilitar protestante Ulster Freedom Fighters (UFF), autor de m¨²ltiples ataques contra ciudadanos cat¨®licos. Seg¨²n el IRA, el UFF celebraba una reuni¨®n en su sede central de Belfast, en Shankill Road, que fue destruida.

En un nuevo comunicado hecho p¨²blico anoche, el IRA calific¨® el atentado de "operaci¨®n que fall¨® tr¨¢gicamente". La organizaci¨®n republicana asegur¨® que la bomba hab¨ªa hecho explosi¨®n de manera prematura, y afirm¨® que varios de sus militantes figuraban por esta raz¨®n entre las v¨ªctimas. El hecho de que la explosi¨®n se produjera sin ning¨²n aviso previo de parte del IRA explica el car¨¢cter especialmente sangriento del atentado, el m¨¢s mort¨ªfero desde la muerte, en noviembre de 1987, de 11 personas por una bomba en Enniskillen.Las operaciones de rescate se pusieron en marcha a los pocos minutos del estallido de la bomba. Los bomberos se vieron obligados a rescatar a numerosos heridos que se encontraban aprisonados entre los escombros, y que s¨®lo pudieron ser liberados al cabo de varias horas.

En medio de llantos, gritos y escenas de p¨¢nico, numerosos ciudadanos, buscando a posibles familiares, ayudaron a rescatar a heridos y muertos. Con el edificio totalmente demolido por la explosi¨®n, fue necesario esperar varias horas antes de tener la certeza de que ninguna persona m¨¢s hab¨ªa quedado atrapada entre los escombros.

Por fin, a media tarde del s¨¢bado, la polic¨ªa inform¨® que se hab¨ªan producido nueve muertos y un total de 57 heridos, muchos de ellos con graves quemaduras en todo el cuerpo. En los centros hospitalarios no se descartaba la posibilidad de que el n¨²mero de fallecidos aumentase en las horas siguientes. Efectivos del Royal Ulster Constabulary (RUC), el cuerpo de polic¨ªa norirland¨¦s, investigaban ayer las circunstancias de la explosi¨®n. Algunos testigos presenciales aseguraron que dos individuos lanzaron un paquete a trav¨¦s de una ventana de un edificio abandonado. Otros testigos, sin embargo, insist¨ªan en sus declaraciones en que la bomba fue colocada en la entrada de una pescader¨ªa.

El epicentro de la explosi¨®n, el edificio que presuntamente sirve de sede central al grupo clandestino UFF, brazo armado de la Asociaci¨®n de Defensa del Ulster (UDA), est¨¢ situado entre una hilera de peque?os locales comerciales. Fuentes policiales afirmaron que un dirigente del UFF result¨® herido, aunque anoche se desconoc¨ªa si alg¨²n miembro de esa organizaci¨®n figura entre los muertos. En un comunicado entregado anoche a una emisora local, el UFF anunci¨® la "movilizaci¨®n total" de sus miembros y amenaz¨® con represalias inmediatas no s¨®lo contra el IRA, sino tambi¨¦n contra los grupos cat¨®licos moderados.

El atentado es continuaci¨®n de una cadena de ataques llevados a cabo en el Ulster por grupos paramilitares unionistas. Ayer mismo, el UFF se responsabiliz¨® de la muerte de un taxista en el norte de Belfast, tiroteado en su veh¨ªculo.

Reacci¨®n de Major

El primer ministro brit¨¢nico, John Major, que se encontraba ayer en Chipre, calific¨® la acci¨®n del IRA como "sangrienta y malvada". Major lanz¨® un llamamiento a la calma y pidi¨® que se evite la tentaci¨®n del ajuste de cuentas, que s¨®lo conducir¨ªa a relanzar la espiral de la violencia. El jefe del Gobierno brit¨¢nico descart¨® por otra parte cualquier participaci¨®n de los radicales republicanos en las negociaciones de paz de Irlanda de Norte. Hasta la fecha, el Sinn Fein, el brazo pol¨ªtico del IRA, ha sido excluido de las conversaciones pol¨ªticas actualmente en curso sobre el futuro de la provincia, aunque manten¨ªa, sin embargo, encuentros con el l¨ªder de los modera' dos republicanos, John Hume. Uno de los temas tratados en esos contactos era precisamente la posibilidad de un alto el fuego del IRA para facilitar el proceso de paz.

El atentado de ayer, sin embargo, pone en cuesti¨®n la continuidad de tales encuentros. Los analistas pol¨ªticos atribuyen el recrudecimiento de las acciones de los unionistas protestantes a su voluntad de suscitar una reacci¨®n violenta del IRA y torpedear as¨ª el proceso de negociaciones entre moderados y radicales cat¨®licos.