Caligramas y constelaciones

De entre las distintas propuestas que la mayor¨ªa de las galer¨ªas de Barcelona nos presentan estos d¨ªas a modo de homenaje a Joan Mir¨®, pocas nos parecen tan acertadas como la doble aportaci¨®n de Joan Fontcuberta (Barcelona, 1955). Bajo los t¨ªtulos El rastre de les coses: cal.ligrames de llum y Constel.lacions: pluja d?estels, este fot¨®grafo logra referirse al universo del maestro conmemorado desde una ¨®ptica ir¨®nica y personal, adem¨¢s de inmersa en sus habituales especulaciones est¨¦ticas.Para la realizaci¨®n de los caligramas de luz que presenta en la galer¨ªa Antonio de Barnola, Fontcuberta recogi¨® diversos elementos naturales (flores, hojas, ramas) de los paisajes de Mont-roig y Mallorca, para colocarlos despu¨¦s sobre papel fotosensible y exponerlos a la luz -mediante la t¨¦cnica conocida como fotograma-, para que ellos mismos crearan su propia representaci¨®n. Estas im¨¢genes, obtenidas sobre papeles de distintas tonalidades, conforman una suerte de mosaicos al alternarse con otras de naturaleza similar, pero que no est¨¢n fijadas y que se ir¨¢n degradando con el tiempo tal y como los objetos que las han originado.

Se trata de unos trabajos decorativos s¨®lo aparentemente, que remiten a los estampados florales que ya antes han interesado a Fontcuberta, puesto que, en el fondo, suscitan interesantes cuestiones epistemol¨®gicas y ling¨¹¨ªsticas. A saber, las fronteras entre la realidad y su representaci¨®n, lo natural y lo artificial, y la naturaleza misma de la fotograf¨ªa y su supuesta objetividad. Las formas que se nos presentan recuerdan a veces, adem¨¢s, ciertos trazos autom¨¢ticos y caligram¨¢ticos mironianos.

Por otra parte, en la galer¨ªa Antoni Estrany, Fontcuberta presenta una serie de constelaciones a modo de fotograf¨ªas astron¨®micas. A primera vista podr¨ªamos pensar que se trata de refinados ejercicios t¨¦cnicos de prospecci¨®n espacial -con anterioridad, Fontcuberta ha imitado la ret¨®rica expositiva de distintas disciplinas cient¨ªficas-, que adem¨¢s de referirse a la tradici¨®n rom¨¢ntica de lo sublime, constituyen im¨¢genes de gran contenido pl¨¢stico.

En realidad, sin embargo, lo que se nos presenta son ampliaciones de reproducciones fotogram¨¢ticas de distintos parabrisas de autom¨®viles sobre los que se han estrellado mosquitos y otros insectos. Vemos, pues, cartograf¨ªas de paisajes org¨¢nicos conformados al azar, en ¨²ltimo t¨¦rmino por una sucesi¨®n de muertes violentas que, como en la serie de caligramas comentada anteriormente, se han obtenido permitiendo que una materia org¨¢nica reconfigure su propia representaci¨®n. Y destacar, que no es poco importante, que todo el sustrato te¨®rico de estas obras no empana nunca la enorme belleza aur¨¢tica de su presencia.