La movilizacion de los ciudadanos fue la mejor respuesta contra ETA

Del segundo secuestro m¨¢s largo de ETA, el del ingeniero Julio Iglesias Zamora, quedar¨¢ para siempre la imagen de un lazo. Un lazo azul junto al coraz¨®n de miles y miles de ciudadanos vascos, primero, y de toda Espa?a, despu¨¦s, que marca el inicio del compromiso individual contra el terrorismo. Los partidarios de la libertad tomaron las calles del Pa¨ªs Vasco en una continuada exigencia de libertad que tuvo el s¨¢bado 11 de septiembre en San Sebasti¨¢n su punto ¨¢lgido. Ese d¨ªa 80.000 personas desfilaron en silencio por las canes de la capital donostiarra para pedir la libertad del ingeniero secuestrado.

Herri Batasuna intent¨®, una semana despu¨¦s, rivalizar con aquella demostraci¨®n c¨ªvica en pro de la paz. Reuni¨® a muchos fieles radicales, pero no pudo reconquistar la calle. Julio Iglesias Zamora pag¨® con 117 d¨ªas de cautiverio -s¨®lo el secuestro de Emiliano Revilla, que estuvo 249 d¨ªas en poder de la organizaci¨®n terrorista tuvo una duraci¨®n mayor-, pero ETA jam¨¢s hab¨ªa conocido tal rechazo.Los trabajadores de Ikusi, los compa?eros de Iglesias, prendieron la llama de la contestaci¨®n y de ellos parti¨® tambi¨¦n la idea del lazo azul en el pecho, que hoy se ha convertido en un grito compartido contra el terrorismo. El 12 de julio, una semana despu¨¦s del secuestro, comenzaron las movilizaciones. Desde ese d¨ªa, cada lunes en la f¨¢brica y todos los jueves en la calle, la plantilla no ha faltado a su cita silenciosa contra la barbarie.

Ese ejemplo de tenacidad prendi¨® en todos. Primero fueron los partidos pol¨ªticos de la Mesa de Ajuria Enea los que el 27 de julio hicieron un pronunciamiento duro contra el secuestro. Despu¨¦s, las voces exigiendo la liberaci¨®n partieron de artistas, escritores y deportistas y se extendieron a toda la sociedad vasca.

El ejemplo de sus compa?eros de trabajo convirti¨® la inauguraci¨®n del estadio de Anoeta, el pasado 13 de agosto, en un acto contra ETA. Igual que, d¨ªas despu¨¦s, el 5 de septiembre, Vitoria fue un ensayo para conjugar la protesta pac¨ªfica, el lazo azul y el silencio. El clamor de la protesta pac¨ªfica convirti¨® a las calles de San Sebasti¨¢n en una riada humana el pasado 11 de septiembre. El consejero de Interior del Gobierno vasco, Juan Mar¨ªa Atutxa se?al¨® aquel d¨ªa que, a la vista de la impresionanente multitud, "los violentos deber¨ªan reflexionar aunque sea cinco minutos".Otras citas preparadas

Los momentos de optimismo como el desmantelamiento de la red de extorsi¨®n, las manifestaciones masivas o el movimiento de solidaridad en que se convirtieron las fiestas de San Sebati¨¢n de este a?o, se combinaron con el atentado mortal contra un general el pasado d¨ªa 18 en Madrid o la campa?a de amenazas contra los portadores del lazo azul y las autoridades vascas.

Pero la respuesta mayoritaria de la sociedad demuestra que, ya para siempre, la calle est¨¢ contra ETA. Si Julio Iglesias no hubiera sido liberado ayer, Iniciativa Ciudadana habr¨ªa continuado convocando a los ciudadanos. El pr¨®ximo 6 de noviembre, en Bilbao, San Sebati¨¢n, Vitoria, Pamplona y Bayona ( Francia) hab¨ªa ya una nueva cita preparada contra ETA.