Saltar al paro sin red
La protecci¨®n por desempleo: ?una garant¨ªa del Estado de bienestar o un desincentivo a la b¨²squeda de empleo?
Ning¨²n seguro de desempleo desincentiv¨® la b¨²squeda activa de un nuevo puesto de trabajo para la familia retratada en 1940 por John Ford en Las uvas de la ira. Su tiempo de estancia en el paro depend¨ªa s¨®lo de la rapidez con la que pod¨ªan abalanzarse a la cola de la primera oferta, aunque ¨¦sta fuera para suplir, bajo el estigma de ser esquiroles, a alg¨²n grupo de huelguistas. "Cuando hable conmigo, ll¨¢meles trabajadores en paro", arg¨¹¨ªa -tambi¨¦n con el trasfondo de la gran depresi¨®n- el polic¨ªa corrupto de Erase una vez en Am¨¦rica, de Sergio Leone.El debate ahora es otro. Han bastado algunos a?os de desarrollo del denominado Estado de bienestar para que surjan cualificadas voces en contra de garantizar la raci¨®n de pescado a los parados en lugar de conminarles a buscar nuevos mares a¨²n con peces.
La Comisi¨®n Europea, en las conclusiones de un estudio realizado este a?o sobre c¨®mo Mejorar el funcionamiento del mercado de trabajo, destaca el impacto desincentivador de la protecci¨®n al desempleo sobre la reincorporaci¨®n del parado al trabajo. La comisi¨®n recomienda, por ejemplo, que "cuando la diferencia entre la renta neta de un trabajador empleado o desempleado sea poco significativa, los pa¨ªses deben introducir alg¨²n impuesto u otra pol¨ªtica sobre el seguro de desempleo que reduzca este efecto adverso sobre la b¨²squeda de un nuevo empleo, aunque sin olvidar el mantenimiento de la protecci¨®n social".
El Gobierno espa?ol acaba de justificar el proyecto de incorporar el seguro de desempleo a las rentas sujetas al IRPF y a cotizaciones sociales precisamente para evitar esto: ganar m¨¢s en paro que trabajando. El secretario general de Empleo, Marcos Pe?a, afirma que "aunque hay que evitar que se enquiste la cultura del subsidio, hay que procurar tambi¨¦n que no se siga enfatizando con el calificativo de vago al hablar de los parados, y acentuar, a cambio, el drama que supone el desempleo".
Sin hablar de vagos, la influyente OCDE (Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y Desarrollo Econ¨®mico) alerta, en su ¨²ltimo informe sobre el empleo, sobre la necesidad de "redefinir los sistemas de protecci¨®n al desempleo con el objetivo de que mantengan al parado en contacto con el mercado de trabajo, en lugar de alentar su dependencia econ¨®mica a largo plazo".
Esta preocupaci¨®n por el impacto del seguro de paro en la intensidad de b¨²squeda de un nuevo empleo ha sido bastante estudiada. El brit¨¢nico, Michael Burda conclu¨ªa, ya en 1988, que un seguro de desempleo "generoso" tiende a aumentar la tasa media de paro. El motivo es que los parados rechazar¨¢n los empleos con menores salarios mientras tengan como reserva el seguro de desempleo.. El estadounidense Robert Solow, en cambio, cree que es muy dif¨ªcil demostrar esta opini¨®n te¨®rica.
El coste de buscar
La idea general es que cuando alguien pierde su empleo se enfrenta, entre otros, al coste de buscar un nuevo puesto. de trabajo. Las prestaciones, seg¨²n esta visi¨®n, "subvencionan" esa b¨²squeda, por lo que el parado tendr¨¢ menos inconvenientes en dedicar m¨¢s tiempo y menos esfuerzo a su reincorporaci¨®n a la vida activa.
La patronal CEOE est¨¢ de acuerdo con esta opini¨®n. Su asesor Fabi¨¢n M¨¢rquez considera que el efecto desincentivador de las prestaciones sobre la b¨²squeda de empleo es evidente. A juicio de M¨¢rquez, este desincentivo se plasma en el elevado porcentaje de parados con derecho a largos periodos de protecci¨®n (m¨¢s de 12 meses) que agotan la prestaci¨®n (v¨¦ase cuadro 3).
Los sindicatos mantienen la opini¨®n contraria. Seg¨²n Eduardo Guti¨¦rrez, del gabinete t¨¦cnico de CC OO, "el nivel y la duraci¨®n de las prestaciones no puede explicar m¨¢s que fracciones infinitesimales del paro existente". Domingo Bartolom¨¦, de UGT, cree que "decir que el seguro de paro desincentiva la b¨²squeda de empleo es un instrumento de marketing para culpar al desempleado de su dram¨¢tica situaci¨®n"
En estos momentos hay dos estudios en marcha que intentan contrastar la idea del seguro de paro, como desincentivador de la b¨²squeda, de empleo. Juan Manuel Blanco, profesor de Econom¨ªa de la Universidad de Valencia, trabaja con los datos de la Encuesta de Condiciones de Vida y Trabajo, que se elabor¨® en 1985 para medir el impacto de la econom¨ªa sumergida.
Blanco concluye que la protecci¨®n por desempleo "podr¨ªa ser responsable de entre uno y tres puntos porcentuales del 22% de la actual tasa de paro". Este estudio tambi¨¦n "observa" que, "durante su primer a?o de paro", los desempleados que no cobran ning¨²n seguro de paro tienen el doble de probabilidad de reincorporarse a la actividad que quienes lo cobran. Este economista matiza que los resultados son provisionales.
El catedr¨¢tico de Econom¨ªa Luis Toharia dirige el segundo trabajo, que utiliza datos recientes del Inem. Inmaculada Cebri¨¢n, una de los cinco economistas de la Universidad de Alcal¨¢ de Henares que participan en este proyecto, afirma -"con todas las precauciones que deben acompa?ar a resultados provisionales"- que "un alargamiento de la duraci¨®n potencial del derecho de cobro de una prestaci¨®n contributiva probablemente contribuya a prolongar tambi¨¦n la duraci¨®n real de los periodos de paro".
El impacto desincentivador del seguro de paro en la b¨²squeda de empleo afecta, seg¨²n este an¨¢lisis, a la duraci¨®n de la prestaci¨®n. A ello se suma. -a?aden- la p¨¦rdida de capital humano (cualificaciones), el des¨¢nimo o incluso la discriminaci¨®n en contra de su contrataci¨®n que soporta el parado de larga duraci¨®n.
Con esta conclusi¨®n: a m¨¢s tiempo de prestaci¨®n, m¨¢s tiempo de b¨²squeda, pero a m¨¢s tiempo en el paro, menos posibilidades de salir de ¨¦l. Estos economistas alertan sobre la posibilidad de que una de las medidas adoptadas por el Gobierno para racionalizar el seguro de desempleo tenga efectos contrarios al deseado. En concreto, advierten que aplazar el cobro de la prestaci¨®n por desempleo hasta que se agote la indemnizaci¨®n podr¨ªa ampliar el impacto negativo de las prestaciones de larga duraci¨®n en la salida del desempleo. Tal impacto negativo no se producir¨ªa, por ejemplo, si al parado le "duele m¨¢s" gastar su indemnizaci¨®n que el seguro, porque se dedicara con mas ah¨ªnco a buscar trabajo desde el principio.
Marcos Pe?a, desde el Ministerio de. Trabajo, espera que ocurra lo segundo: "Que muchos parados puedan haber salido del desempleo antes de agotar su indemnizaci¨®n".
Proteger al necesitado
La preocupaci¨®n por cubrir antes a quien de verdad lo necesite se apoya en las siguientes cifras: La protecci¨®n por desempleo costar¨¢ en 1994, seg¨²n el presupuesto, 1.971.089 millones de pesetas, menos de los 2,1 billones previstos para este a?o. En 1994, de ese dinero, s¨®lo el 56% se cubrir¨¢ en 1994 con las cotizaciones sociales de empresarios y trabajadores. Esto deja m¨¢s del 40% (unos 800.000 millones de pesetas) a financiar con los presupuestos del Estado. Pretender que el elevado coste del desempleo obedece a que los parados est¨¢n instalados en una cultura del ocio es %rresponsable", para Marcos Pe?a, y "directamente falso", seg¨²n los sindicatos.
En contra de esta "supuesta preferencia por el ocio", CC OO contabiliza "siete recientes convenios colectivos, que afectan a m¨¢s de 7.000 trabajadores, en empresas que estaban a punto de concretar expedientes de regulaci¨®n de empleo y donde se ha acordado la congelaci¨®n salarial para evitar despidos".
Adem¨¢s, los parados entrevistados en la Encuesta de Poblaci¨®n Activa (EPA) se muestran mayoritariamente dispuestos a aceptar menos sueldo y menos categor¨ªa laboral con tal de reincorporarse al empleo (cuadro 2).
Con m¨¢s de un 22% de desempleo, es dif¨ªcil no tener alg¨²n amigo o familiar en paro. Una de sus principales quejas se dirige al funcionamiento del Instituto Nacional de Empleo (Inem). Su capacidad como agencia de colocaci¨®n se resume en una cifra: s¨®lo entre el 4% y el 5% de las colocaciones que registra el Inem parten de ofertas gestionadas por este organismo. La inexistencia de una agencia de colocaci¨®n eficaz es, para muchos parados, el mayor desincentivo a la b¨²squeda de un nuevo empleo, porque "cuando terminas de preguntar y de mandar curr¨ªculos ya no sabes d¨®nde buscar", comenta una auxiliar administrativo en paro desde hace seis meses. La pol¨¦mica sobre el posible impacto contra la b¨²squeda de empleo del seguro no debe olvidar, seg¨²n el responsable de Trabajo, . que "el sistema de protecci¨®n debe velar por la cohesi¨®n social". Para UGT, "hablar de desincentivos s¨®lo fomenta la insolidaridad". En ¨²ltima instancia, el debate apunta al grado que se quiere mantener, y se puede financiar, de un Estado de bienestar que empieza a estar en entredicho.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.