La Constituci¨®n de Yeltsin impedir¨¢ la soberan¨ªa de los entes territoriales rusos
El presidente de Rusia, Bor¨ªs Yeltsin, desarroll¨® ayer una amplia ofensiva para someter a los indisciplinados territorios rusos a la voluntad del poder central. Por una parte, se divulgaron los principios de la doctrina militar, que, asimilando la experiencia de disoluci¨®n violenta del Parlamento, prev¨¦ la utilizaci¨®n del Ej¨¦rcito en conflictos internos. Por otra, Yeltsin dijo a los l¨ªderes territoriales que la palabra "soberan¨ªa" aplicada a las rep¨²blicas de Rusia, no debe figurar en la nueva Constituci¨®n para evitar tendencias separatistas inadmisibles.
Rusia tiene un total de 89 unidades administrativas (contando la rep¨²blica de Chechenia), divididas en tres categor¨ªas y siendo las rep¨²blicas las de mayor entidad. La mayor¨ªa de los l¨ªderes de estos territorios se reunieron ayer en el Kremlin, convocados por primera vez desde que el dirigente ruso disolvi¨® el Parlamento Federal. En un tono directo y sin ninguna ret¨®rica, Yeltsin les present¨® el borrador de la Constituci¨®n, tal como ha quedado tras los sustantivos retoques propresidencialistas introducidos por su equipo.Aceptar la soberan¨ªa de los territorios que integran la federaci¨®n equivaldr¨ªa a aceptar una "confederaci¨®n", lo que a su vez supondr¨ªa "el derecho a salir" de ella "en cualquier momento dijo Yeltsin, que, defini¨¦ndose como garante de la integridad" del Estado, se declar¨® partidario del "derecho de las naciones a autodeterminarse", "con excepci¨®n del derecho a la secesi¨®n de Rusia". El concepto de "soberan¨ªa" de los territorios est¨¢ recogido en el Tratado Federativo, un documento firmado en marzo de 1992.
La idea de recuperar el terreno perdido se refleja tambi¨¦n en la doctrina militar, un documento de 24 p¨¢ginas aprobado el martes por el Consejo de Seguridad bajo la direcci¨®n de Yeltsin. El ministro de Defensa, P¨¢vel Grachov, reconoci¨® ayer que los sucesos del 3 y el 4 de octubre en Mosc¨² est¨¢n relacionados con "las nuevas tareas" de "algunas unidades de las Fuerzas Armadas", consistentes en ayudar a las tropas del Ministerio del Interior y a la Polic¨ªa a localizar posibles conflictos armados en el territorio de Rusia.
Visto bueno presidencial
La legislaci¨®n exclu¨ªa la utilizaci¨®n de las Fuerzas Armadas en conflictos internos. A Yeltsin corresponde dar el visto bueno para el nuevo uso, seg¨²n indic¨® Grachov, que admiti¨® la posibilidad de que en el futuro el Parlamento asuma esta funci¨®n.
La doctrina militar no fue adoptada el 18 de octubre como estaba previsto, porque el estamento castrense se resisti¨® a las exigencias del primer ministro, V¨ªctor Chernomirdin, para que las Fuerzas Armadas cumplieran funciones policiales, seg¨²n el diario Komsom¨®lskaia Pravda. La doctrina prev¨¦ la utilizaci¨®n de las Fuerzas Armadas en caso de recrudecimiento de las actividades de grupos nacionalistas y separatistas que representen peligro para la integridad de Rusia y recurran a la violencia armada; en caso de intento de derrocar el r¨¦gimen constitucional de forma violenta; de ataque a instalaciones nucleares o qu¨ªmicas, y en caso de formaciones armadas ?legales. Algunas de estas circunstancias, citadas a la agencia Interfax por el vicesecretario del Consejo de Seguridad, Valer? Man¨ªlov, son realidades que el poder central ha ignorado hasta ahora, por ejemplo, en el norte del C¨¢ucaso.
La doctrina militar prev¨¦ la posibilidad de estacionar tropas y mantener bases militares fuera en los pa¨ªses de la Comunidad de Estados Independientes, seg¨²n Grachov, que consider¨® prioritaria la creaci¨®n de unas fuerzas m¨®viles basadas en la infraestructura de la infanter¨ªa de Marina. Rusia declara no tener enemigos en otros Enemigos exteriores dos y las armas nucleares son definidas como un "medio pol¨ªtico de contenci¨®n" y no como un instrumento de acci¨®n b¨¦lica. Las guerras locales son consideradas como la principal amenaza para la paz.
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