La UE fuerza a negociar la paz a los bandos bosnios

Los ministros de Exteriores de los Doce obtuvieron as¨ª un ¨¦xito, todav¨ªa modesto y sin traducci¨®n a¨²n en el escenario b¨¦lico, en la primera acci¨®n com¨²n de pol¨ªtica exterior que emprende la flamante Uni¨®n Europea.No es nada frecuente que los ministros de Exteriores de la UE en pleno se re¨²nan con representantes de pa¨ªses terceros y menos todav¨ªa con dirigentes proscritos por las organizaciones internacionales como es el caso de los dirigentes serbios Slobodan Milosevic y Radovan Karadzic. Menos frecuente todav¨ªa es que la reuni¨®n supere el tiempo de un almuerzo o de una cena y se extienda durante toda la jornada, como sucedi¨® ayer en el Palacio de las Naciones, de Ginebra.

La reanudaci¨®n de las negociaciones de paz, al filo de la cat¨¢strofe invernal, el apoyo al empe?o de Ogata por hacer llegar la ayuda humanitaria (combustible para calefacci¨®n principalmente) ante el dur¨ªsimo invierno que ya ha ca¨ªdo sobre los Balcanes, el bal¨®n de ox¨ªgeno que necesitaban los infortunados negociadores de la UE y de Naciones Unidas, David Owen y Thorvald Stoltenberg, respectivamente, y la primera acci¨®n com¨²n de la Uni¨®n Europea dentro de la reci¨¦n estrenada PESC (Pol¨ªtica Exterior y de Seguridad Com¨²n) bien val¨ªan un desplazamiento a la ciudad del Leman de la entera corte del Consejo de Ministros de Exteriores.

Concesiones territoriales

Tan satisfechos quedaron los ministros del resultado obtenido que se han prometido volver a reunirse en id¨¦nticas condiciones antes de fin de a?o para evaluar y seguir proporcionando nuevos impulsos al proceso de paz. Adem¨¢s de los Doce estuvieron en la reuni¨®n los tres presidentes de las rep¨²blicas ex yugoslavas implicadas en el conflicto (Alia Izetbegovic, por Bosnia; Milosevie, por Serbia; Franjo Tudjman, por Croacia), adem¨¢s de los dirigentes de cada bando en Bosnia, representaci¨®n de Montenegro y jefes militares de cada fracci¨®n. La presencia de representantes rusos y norteamericanos proporcion¨® una mayor base pol¨ªtica al nuevo plan, que prev¨¦ la suspensi¨®n paulatina de las sanciones contra Serbia a cambio de concesiones territoriales (del 3% al 4% de territorio) a los musulmanes bosnios.

El despliegue de tanto esfuerzo europeo se debe tambi¨¦n a la especial circunstancia que atraviesa la UE. Un pa¨ªs directamente afectado por el conflicto, como es Grecia, acaba de dar el Gobierno de nuevo a Andreas Papandreu, tras unas elecciones que han alentado la fiebre nacionalista y proserbia. Atenas se ocupar¨¢ adem¨¢s de la presidencia de turno de la UE a partir de enero, por lo que contar¨¢ con una especial capacidad de maniobra para seguir obstaculizando el reconocimiento de Macedonia y ahora mismo ya forma parte con el Reino Unido y con B¨¦lgica de la troika comunitaria. Este ¨®rgano est¨¢ formado por las tres presidencias consecutivas, encargado de representar a toda la Uni¨®n en sus relaciones internacionales. No es extra?o, por tanto, que los ministros prefieran sentar el precedente de un montaje de gran envergadura antes de dar juego a una troika orientada por Grecia.

El resultado de la reuni¨®n es que ayer mismo por la noche empezaron las negociaciones, por el momento en contactos bilaterales, y que ya existe el compromiso escrito de los militares de todos los bandos de respetar los corredores de suministro de la ayuda humanitaria. La ¨²nica se?al desalentadora del documento es que falta la firma del comandante serbio, el general Ratko MIadic, a quien se deben las principales violaciones del acuerdo inicial arrancado por Sadako Ogata el 18 de noviembre. En su lugar ha sido el psiquiatra Radovan Karadz?c quien ha estampado su firma como garant¨ª a. Las fuerzas de las Naciones Unidas tienen a partir de ahora el apoyo de las tres partes si quieren usar las resoluciones del Consejo de Seguridad para repeler las agresiones que sufran o pedir el apoyo a¨¦reo de la OTAN.

La reanudaci¨®n de las negociaciones no significa que las tres partes hayan levantado sus objeciones a los aspectos m¨¢s conflictivos del plan de paz. Los serbios se niegan a ceder el 3% o 4% de territorio que exigen los bosnios con apoyo de la UE y reivindican el inmediato e incondicional levantamiento de las sanciones. Los croatas se oponen a una salida al mar para los musulmanes.

Estos ¨²ltimos claman contra la partici¨®n de Bosnia en tres mini-estados, considerada ya como inevitable en el nuevo gui¨®n de paz. Aunque no hay acuerdo todav¨ªa, todas las partes acceden a reanudar la negociaci¨®n, lo cual no es poco en una situaci¨®n de guerra y ante un invierno que se antoja terrible.