En defensa de la veracidad

Los firmantes de este escrito pretendemos con el mismo aportar luz y nuevos datos a la pol¨¦mica provocada por el gobierno municipal de Rivas-Vaciamadrid con motivo de la publicaci¨®n, el pasado d¨ªa 20, en el diario EL PA?S, de un art¨ªculo firmado por el periodista Vicente G. Olaya; en ¨¦l se informaba sobre la situaci¨®n econ¨®mica de nuestro Ayuntamiento y algunas decisiones tomadas por el alcalde.En primer lugar, queremos felicitar al se?or Olaya por su trabajo de investigaci¨®n y s¨ªntesis que plasma en su art¨ªculo antes citado y que en ning¨²n caso puede considerarse devaluado por el hecho de haberse colado dos errores dentro del amplio n¨²mero de datos que en ¨¦l se aportan.

En segundo lugar, queremos manifestar que entendemos el ataque y descalificaciones que hacia el anterior formula Fausto Fern¨¢ndez, concejal de IU, en la carta que este mismo diario publica el pasado d¨ªa 27, con el t¨ªtulo En defensa del alcalde de Rivas. Nos parece humana y justificada su actitud, vistas las cosas desde el punto de vista del citado concejal. Humana, porque el se?or Fern¨¢ndez no hace otra cosa que intentar lavar la imagen de su compa?ero de coalici¨®n -que no de partido-, seriamente da?ada como consecuencia de la publicaci¨®n de sus desmanes.

Justificada, porque ser¨ªa una incongruencia que el citado concejal se mostrara en contra de la subida del sueldo del alcalde, 12,37%, cuando ¨¦l y dos concejalas m¨¢s de IU -a eso queda reducido el grupo que gan¨® las elecciones en Rivas- votaron a favor de unos presupuestos municipales en los que se dota partida presupuestaria para dicho aumento. Esos presupuestos tambi¨¦n prev¨¦n la liberaci¨®n de cuatro concejales del equipo de gobierno y seis cargos de confianza, todos ellos con salarios similares al del alcalde.

El se?or Fern¨¢ndez desea vehementemente ser uno de los agraciados, se supone que con vestuario y protocolo incluido. Todo, claro est¨¢, sufragado por la fort¨ªsima subida de los tributos locales en Rivas.

Entendemos que un cargo p¨²blico debe percibir un salario digno; en este caso, nos parece digno el que el se?or Serrano percib¨ªa en su puesto de trabajo de profesor.

Rechazamos la explicaci¨®n del se?or Fern¨¢ndez cuando suma el salario de profesor y las cantidades que percib¨ªa como concejal delegado, ya que en ning¨²n caso se deben acumular sueldos p¨²blicos, aunque no llegue al caso del se?or Solchaga.

Si el se?or Serrano no se considera suficientemente remunerado, le invitamos a que renuncie a su cargo, ya que el mismo es voluntario.

En otro p¨¢rrafo del escrito del se?or Fern¨¢ndez se se?ala un supuesto acuerdo o convenio entre IU y el PSOE sobre retribuciones de cargos p¨²blicos, hecho que para nosotros, cargos electos de IU y componentes de los anteriores gobiernos municipales de Rivas por voluntad del electorado, nos resulta totalmente desconocido; por ello, llegamos a la conclusi¨®n de su inexistencia. En todo caso entendemos que la equiparaci¨®n que se plantea entre sueldos del alcalde e interventor no tiene base legal, ya que se trata de funciones distintas.

La retribuci¨®n del interventor se establece en funci¨®n de la titulaci¨®n, m¨¦rito y capacidad demostrada a trav¨¦s de la correspondiente oposici¨®n, requisitos que no son exigibles a los cargos p¨²blicos.

Existen infinidad de casos, suficientemente conocidos, en que los funcionarios de las administraciones p¨²blicas perciben un salario superior al de los cargos p¨²blicos, incluido el propio presidente del Gobierno.

El se?or Fern¨¢ndez, que defiende la subida del 12,87% en el sueldo del alcalde y nos anuncia una subida del 35% en los pr¨®ximos dos a?os, ha sido incapaz de llegar a un acuerdo con los empleados del Ayuntamiento de Rivas, imponi¨¦ndoles una subida pata 1993 del l,8%; pol¨ªtica salarial que, como pueden considerar los lectores, es "muy de izquierdas".

Hay que resaltar que, a pesar del furibundo alegato del se?or Fern¨¢ndez, ¨¦ste no desmiente ninguno de los datos aparecidos en el art¨ªculo del se?or Olaya. Ni lo referido al sueldo, ni el informe negativo del interventor sobre los presupuestos, ni al cobro del k?lometraje.

Para finalizar, debemos aclarar que no conocemos al se?or Olaya lo suficiente para adjudicarle ning¨²n color a su labor period¨ªstica.

A quien s¨ª conocemos es al citado Fern¨¢ndez; por ello, nos atrevemos a decir que, en su trabajo pol¨ªtico, el color que mejor le cuadra es el pardo.

Buenas muestras de intolerancia ya nos ha dado. Encajen las cr¨ªticas que provocan con su mal gobierno y, siendo coherentes con las ideas que dicen defender, apl¨ªquense el conocido refr¨¢n castellano: "Rectificar es de sabios".- Grupo municipal mixto del Ayuntamiento de Rivas-Vaciamadrid,