Un beb¨¦ secuestrado es abandonado en una iglesia

VIENE DE LA P?GINA 1Al recoger a la hija, el padre s¨®lo pregunt¨® por una farmacia nada m¨¢s salir de la iglesia. Siguiendo las indicaciones de un vecino, lleg¨® hasta una de las dos farmacias que existen en el pueblo. All¨ª pidi¨® ayuda. Primero, alimento y pa?ales para la ni?a, y despu¨¦s un tel¨¦fono desde donde hacer una llamada.

Luisi, la farmac¨¦utica, explicaba a este diario que encontr¨® a este hombre, el padre de la ni?a, muy nervioso y le dio lo que ped¨ªa. Despu¨¦s de llamar por tel¨¦fono, ¨¦ste le explic¨® que esa misma ma?ana hab¨ªan secuestrado a su hija de su domicilio en Madrid, cuando estaba a cargo de una asistenta.

Seg¨²n el relato del padre, los secuestradores hab¨ªan pedido un rescate que deb¨ªa ser depositado en el puente del r¨ªo Alberche, muy cerca de San Mart¨ªn. Tras el pago, la ni?a aparecer¨ªa en la casa del cura. La farmac¨¦utica decidi¨® entonces llamar al cuartelillo de la Guardia Civil.

Los agentes del instituto armado se presentaron enseguida en la farmacia, a la vez que llegaban a la localidad agentes uniformados del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa procedentes de Madrid que, seg¨²n fuentes de la investigaci¨®n, hab¨ªan seguido la operaci¨®n de cerca.

En la Guardia Civil se corrobor¨® la versi¨®n del padre de la ni?a. En Madrid, portavoces policiales informaron que en el seguimiento del suceso hab¨ªan intervenido agentes del grupo de Secuestros de la Brigada de Polic¨ªa Judicial. Las primeras versiones recogidas en fuentes cercanas a la investigaci¨®n apuntaron que no se hab¨ªa practicado ninguna detenci¨®n, pero s¨ª se hab¨ªa podido frustrar la operaci¨®n de los secuestradores.

El suceso era conocido por los responsables policiales y la Delegaci¨®n del Gobierno. Sin embargo, a las preguntas de este peri¨®dico, un portavoz oficial respondi¨®, a trav¨¦s de terceras personas, que "no ten¨ªa nada que decir".