Anguita culpa a Occidente de la victoria de Zhirinovski

I. C. Julio Anguita, coordinador general de Izquierda Unida (IU), fue fiel a su reputaci¨®n de ser el m¨¢s correoso opositor. Se sali¨® del gui¨®n de la comparecencia del presidente del Gobierno -la ¨²ltima cumbre europea- y aprovech¨® para culpar en parte a Occidente del ¨¦xito electoral en Rusia del ultranacionalista VIadimir Zhirinovski.

"Se ha sido demasiado alegre" , afirm¨® recordando el respaldo que en octubre brindaron los gobiernos occidentales al presidente Boris Yeltsin que disolvi¨® y acab¨® ordenando el asalto de un Parlamento no elegido. "Con mucha tranquilidad no se puede apoyar a un golpista", a?adi¨®. "La transici¨®n de un sistema a otro requiere m¨¢s tranquilidad, m¨¢s calma, m¨¢s ayuda", porque de lo contrario se llora como ahora".

Puestos a arremeter, Anguita tambi¨¦n lo hizo contra Alemania. Seg¨²n ¨¦l, "hay que echarse a temblar" ante la iniciativa del ministro alem¨¢n de Exteriores, Klaus Kinkel, de reconocer a Macedonia justo en v¨ªsperas de la presidencia griega de la Uni¨®n Europea. Atenas se niega a reconocer a Skopje porque considera que el uso del nombre de Macedonia implica una reivindicaci¨®n territorial sobre su regi¨®n septentrional.

Para Anguita "el precipitado reconocimiento" con el que los Doce, presionados por Bonn, aceptaron la independencia de las ex rep¨²blicas yugoslavas en enero de 1992 "ha ayudado a agravar ciertos problemas que asuelan Europa".

En t¨¦rminos muy velados, Gonz¨¢lez ha reconocido a veces que el reconocimiento de Croacia o Eslovenia pudo ser precipitado. Ayer, sin embargo, rechaz¨® de lleno el argumento de Anguita que contiene ,,errores de concepto"."No se trata de reconocer", le replic¨® el presidente, porque toda la UE menos Grecia ya lo hizo en abril cuando ese pa¨ªs ingres¨¦ en la ONU bajo el nombre de ex Rep¨²blica Yugoslava de Macedonia. "Se discute se si mandan representantes diplom¨¢ticos", prosigui¨® Gonz¨¢lez, cometiendo, a su vez, un error.

Alemania y Francia proponen, en realidad, establecer relaciones diplom¨¢ticas con Macedonia lo que no implica abrir embajadas, sino contar con embajadores acreditados. Espa?a se resiste a ello porque no quiere perjudicar a Grecia con la que tiene intereses comunes.