El atasco de la Castellana ser¨¢ una dificultad m¨¢s para el Par¨ªs-Dakar

Los pilotos del Rally Par¨ªs-Dakar tendr¨¢n ma?ana que medir la fuerza de sus motores con los taxistas, los repartidores, los conductores de la EMT y dem¨¢s usuarios de las carreteras y calles de Madrid.La carrera, por primera vez en su historia, cruzar¨¢ Madrid en busca del desierto, pero antes har¨¢ una parada en el circuito del Jarama, donde se efectuar¨¢ uno de los controles de la prueba, sobre las cuatro de la tarde.

La segunda etapa del rally pasar¨¢ unas dos horas en suelo madrile?o: entrar¨¢ por la N-I, procedente de Vitoria, seguir¨¢ por la Castellana y enlazar¨¢ con la autov¨ªa de Andaluc¨ªa hasta llegar a Granada. Los camiones, motos y coches que paralizan Par¨ªs cada final de a?o pueden repetir la haza?a en Madrid. Pero el departamento de Circulaci¨®n, que dirige el concejal Jos¨¦ Antonio Garc¨ªa Alarilla, no ha previsto el corte de ninguna calle.La caravana del desierto llega procedente de Francia y, como Napole¨®n, entrar¨¢ por el puerto de Somosierra. Los 250 veh¨ªculos dejar¨¢n atr¨¢s el valle del Lozoya, bordear¨¢n el pico de la Miel y se plantar¨¢n en el circuito del Jarama entre las tres y media y las cuatro de la tarde.

All¨ª, los carn¨¦s de ruta de los pilotos ser¨¢n sellados por primera vez con tinta madrile?a. Los veh¨ªculos abandonar¨¢n el circuito con cuentagotas: se ha establecido un intervalo de uno o dos minutos entre coche y coche.

Los veh¨ªculos bajar¨¢n por Castellana, Recoletos y el paseo del Prado en busca de la autov¨ªa de Andaluc¨ªa. Los 40 camiones, 40 motos y 120 coches que participan en la l6a edici¨®n del Par¨ªs-Dakar tendr¨¢n que respetar, como los dem¨¢s, las normas de circulaci¨®n, ya que este tramo no constituye una prueba de velocidad, sino de resistencia, seg¨²n explica un responsable de la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico. Esto quiere decir que tendr¨¢n que respetar los sem¨¢foros, los l¨ªmites de velocidad y las indicaciones de los guardias.

Ayer, la Delegaci¨®n del Gobierno no ten¨ªa constancia de que se fuera a establecer una vigilancia especial. Sin embargo, un portavoz de la Jefatura Superior de Polic¨ªa indic¨® que, dadas las caracter¨ªsticas de la carrera, es casi seguro que se adopte.

Para los aficionados madrile?os se trata de una oportunidad ¨²nica de ver en directo a los monstruos africanos, y entre ellos a los 26 equipos espa?oles. La representaci¨®n madrile?a est¨¢ en manos de los pilotos motoristas. Destacan entre ellos el veterano Agust¨ªn Fern¨¢ndez (Honda), uno de los m¨¢s expertos en esta carrera, y tambi¨¦n los m¨¢s j¨®venes ¨®scar Gallardo (Cagiva) y Tom¨¢s Santa Cecilia (Yamaha), informa Paco Latorre.

Ninguno de ellos aspira a la victoria, reservada a los que tienen m¨¢s medios. Sin embargo, en el Par¨ªs-Dakar tambi¨¦n reina el esp¨ªritu ol¨ªmpico: m¨¢s importante que vencer es participar y, sobre todo, terminar, volver a Par¨ªs, escenario por primera vez del final de la carrera, previsto para el pr¨®ximo 16 de enero.

La carrera del desierto entrar¨¢ por Ir¨²n en Espa?a y saldr¨¢ por Algeciras con destino a ?frica. ?sta es la segunda vez que el Par¨ªs-Dakar traspasa los Pirineos. La primera, en 1989, pas¨® por Barcelona y congreg¨® a un mill¨®n de personas.

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