El ministerio p¨²blico reclama 20 a?os de c¨¢rcel para el presunto asesino de Lucrecia
El guardia civil Luis Merino P¨¦rez, conocido por Tocho en ambientes ultraderechistas, tendr¨¢ que enfrentarse a una petici¨®n de 20 a?os de c¨¢rcel como presunto asesino de la dominicana Lucrecia P¨¦rez, en la discoteca Four Roses de Aravaca en noviembre de 1992. El ministerio p¨²blico, seg¨²n fuentes jur¨ªdicas, acusa a Luis Merino de homicidio. Adem¨¢s, en el escrito con las conclusiones provisionales remitido a la Audiencia de Madrid, el fiscal aprecia la atenuante de minor¨ªa de edad para los otros tres acusados: Felipe Carlos M. B., para el que pide ocho a?os de prisi¨®n; V¨ªctor Juli¨¢n F. R., y Javier Q. M., a quienes solicita una condena de seis a?os de prisi¨®n para cada uno.Por su parte, Jaime Sanz de Bremond, abogado de la familia de la v¨ªctima y la acusaci¨®n p¨²blica -en nombre de CC OO y la Asociaci¨®n contra la Tortra- piden penas que alcanzan los 70 a?os para el guardia civil.
Lucrecia P¨¦rez, de 33 a?os, viv¨ªa, junto a varios compatriotas, en una discoteca abandonada en Aravaca. Cuatro personas enmascaradas acabaron con su vida el 13 de noviembre de 1992. Dos balas la mataron. Una tercera hiri¨® gravemente a un hombre, Augusto Vargas.
PASA A LA P?GINA 3
Las acusaciones exigen para el guardia entre 50 y 70 a?¨®s de prisi¨®n
El guardia civil acusado de matar a la dominicana deber¨¢ afrontar tambi¨¦n las peticiones de condena de entre 50 y 70 a?os de prisi¨®n. Jaime Sanz de Bremond, representante de la familia de la v¨ªctima, y Jos¨¦ Luis Gal¨¢n, que ejerce la acci¨®n popular en nombre de Comisiones Obreras y la Asociaci¨®n contra la Tortura, han entregado ya sus respectivos escritos de acusaci¨®n en los que reclaman penas que, en cualquier caso, totalizan los 30 a?os de tiempo m¨¢ximo de cumplimiento penitenciario.Sanz de Bremond reclama 30 anos de c¨¢rcel para Merino por el asesinato de Lucrecia y otros 20 a?os por el asesinato frustrado de Augusto Vargas, el compa?ero de alojamiento herido de bala. Para la hija de Lucrecia, Kenia, pide una indemnizaci¨®n de 40 millones adem¨¢s de una pensi¨®n mensual de 100.000 pesetas, revalorizable hasta su mayor¨ªa de edad. De estas cantidades deber¨¢ responder subsidiariamente el Estado. Gal¨¢n eleva la la petici¨®n para Merino a 70 a?os. Para los acompa?antes del guardia civil, Felipe Carlos M. B., V¨ªctor Juli¨¢n F. R. y Javier Q. M., las peticiones oscilan entre los 30 y los 32 a?os.
Cinco agravantes
Los abogados consideran que los acusados actuaron con, entre otras, las agravantes de alevos¨ªa, premeditaci¨®n, nocturnidad, cuadrilla y morada of¨¦ndida, y aplican la atenuante privilegiada de minor¨ªa de edad para los tres amigos del guardia civil.
Ambos letrados recuerdan que el 13 de noviembre de 1992 los procesados, vinculados por ideas y sentimientos racistas, fascistas y de extrema derecha, se reunieron en la plaza de los Cubos y tomaron unas cervezas que en absoluto limitaron sus facultades intelectivas y volitivas". All¨ª decidieron ir a las ruinas de la discoteca, para "ir a liarla con os negros" y "darles un escarmiento", en referencia a los inmigrantes que resid¨ªan en el inmueble.
En el camino, una patrulla de la Polic¨ªa Municipal intercept¨® el veh¨ªculo de Luis Merino, despu¨¦s de que se saltase dos sem¨¢foros en rojo, aunque los agentes permitieron que los acusados siguieran su marcha "ante la exhibici¨®n por parte de Luis de la tarjeta que le acreditaba como funcionario de la Guardia Civil", seg¨²n explica Jos¨¦ Luis Gal¨¢n.
Una vez en la discoteca, dos de los menores se cubrieron el rostro con un pasamonta?as militar y, armados con el arma reglamentaria del agente, un destornillador de 20 cent¨ªmetros, una navaja y una barrena en forma de T, irrumpieron en una de las habitaciones del inmueble, en la que en esos momentos cenaban cuatro inmigrantes dominicanos.
Uno de los menores apag¨® inmediatamente la vela. Luis Merino efectu¨® tres disparos "con el ¨¢nimo inequ¨ªvoco de causar la muerte a cuantas personas all¨ª se encontrasen", concluye el abogado de la acci¨®n popular.
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