Los homosexuales espa?oles exigen la igualdad legal rubricada en Estrasburgo

El caso de Juan Tom¨¢s, trabajador de Iberia que ha denunciado a su empresa por discriminar a su pareja, ha puesto en pie de guerra a los colectivos homosexuales de toda Espa?a. La Radical Gay de Madrid ha llamado a la movilizaci¨®n en todo el pa¨ªs contra Iberia por desobedecer la resoluci¨®n reci¨¦n aprobada por el Parlamento Europeo en Estrasburgo que defiende su igualdad legal frente a los heterosexuales. La condena del Papa a la resoluci¨®n ha echado m¨¢s le?a al fuego. Los colectivos denuncian que los pol¨ªticos sucumben ante los sectores religiosos m¨¢s reaccionarios.

Compa?eros de trabajo de Iberia aseguran que Juan Tom¨¢s demostr¨® un valor descomunal al denunciar que su empresa lo ha discriminado por homosexual. "No hay trabajo en el que uno pueda luchar por hacer valer sus derechos sin hacer frente al miedo a las represalias", dice ¨¦l con modestia. Pero, subrayan sus colegas, en su caso hay que contar con una dosis adicional de coraje, dada la fama conservadora de su entorno laboral. Pero ahora que ¨¦l se ha atrevido, otros dos compa?eros homosexuales -un hombre y una mujer- est¨¢n planeando seguir sus pasos. Otros muchos han contactado con ¨¦l para informarse. El abogado de Juan Tom¨¢s, Pedro L¨®pez, explica que su cliente no puede dar su verdadera identidad ni dar demasiadas explicaciones por "estar sujeto a un reglamento muy estricto, casi militar, que prohibe a los miembros de su colectivo de trabajo hablar con la prensa sobre Iberia".

Todo empez¨® el pasado verano. En el ¨²ltimo convenio colectivo de la compa?¨ªa a¨¦rea se hab¨ªa reconocido el derecho a los descuentos y billetes gratis de que gozan los maridos y esposas de los empleados, a los compa?eros de las parejas no casadas. Se exig¨ªa para ello, acreditar la "convivencia marital" con un certificado de convivencia de al menos dos a?os. Juan. Tom¨¢s esper¨® a que pasasen los meses que a¨²n le faltaban para cumplir con el plazo exigido y, en junio, present¨® la solicitud para que su compa?ero sentimental obtuviese la misma ventaja.

"Que quede claro que este privilegio no supone ninguna carga econ¨®mica para la compa?¨ªa, puesto que, en mi categor¨ªa, s¨®lo se puede gozar de este privilegio cuando hay plazas libres", subraya Juan Tom¨¢s. Por eso, dice, ni siquiera se le pas¨® por la imaginaci¨®n que pudiesen negarle este derecho y que una sentencia del juzgado de lo social de Madrid ante el que denunci¨® su caso le diese la raz¨®n a su empresa, al aferrarse al C¨®digo Civil y esgrimir que la convivencia marital "s¨®lo puede darse entre hombre y mujer".

"Es una interpretaci¨®n que vulnera de forma clara nuestra legislaci¨®n y, en especial, el principio de igualdad proclamado por el art¨ªculo 14 de la Constituci¨®n", dice Pedro L¨®pez, que ya ha presentado recurso ante el Tribunal Superior de Justicia.

"La resoluci¨®n del Parlamento Europeo [aprobada el pasado 8 de febrero] nos ha dado nuevos ¨¢nimos para seguir hasta el fin", explica otro de los trabajadores de Iberia que se prepara para sumarse a la acci¨®n de Juan Tom¨¢s. "Iberia, como empresa p¨²blica, deber¨ªa poner especial empe?o en dar ejemplo", a?ade L¨®pez.

Actitud preconciliar

La Radical Gay, que ha apoyado el caso de Juan Tom¨¢s, est¨¢ planeando la organizaci¨®n de protestas contra Iberia como las que, en su d¨ªa, se hicieron por razones similares contra Renfe y que desembocaron en decenas de detenciones. Este colectivo tambi¨¦n ha lanzado un llamamiento para que los homosexuales espa?oles denuncien las discriminaciones de las que son objeto en sus puestos de trabajo.

Sobre la ¨²ltima arremetida de Juan Pablo II contra el matrimonio homosexual, la Radical Gay cree que lo m¨¢s grave es que las instituciones democr¨¢ticas "no reaccionen". "Una vez m¨¢s se ha demostrado el p¨®der que los sectores religiosos m¨¢s reaccionarios tienen en nuestro pa¨ªs", sentencia,

Mar¨ªa, lesbiana, no manifiesta ninguna sorpresa. "Yo no soy practicante, pero me preocupa la influencia que estas declaraciones pueden tener sobre gente que no tiene acceso a otras voces y su repercusi¨®n entre los pol¨ªticos".

"Las instancias pol¨ªticas deber¨ªan reaccionar porque esta vez el Papa ha atentado directamente contra la soberan¨ªa de la m¨¢xima instancia europea", explica Jordi Petit, secretario general de la Coordinadora Gay-Lesbiana. Para el Grupo Cristianos de la Coordinadora la actitud "preconciliar" del Papa "no coincide con la realidad de la Iglesia del pueblo de Dios ni de la sociedad".