Kimberly Mays deja a sus padres adoptivos y vuelve con los biol¨®lgicos
Siete meses despu¨¦s de conseguir que un tribunal eliminara los derechos de sus padres biol¨®gicos sobre sus padres adoptivos, Kimberly Mays, de 15 a?os de edad, adopt¨® ayer la imagen de la hija pr¨®diga y se traslad¨® a vivir con los primeros. El abogado de Kimberly ha dicho que la joven atraviesa "problemas personales que no tienen nada que ver con la disputa sobre las familias y que necesita que la dejen en paz".El divorcio de sus padres biol¨®gicos que Kimberly Mays consigui¨® fue la culminaci¨®n de una batalla legal que dur¨® 5 a?os. La historia consigui¨® el pasado oto?o la atenci¨®n de todo el pa¨ªs: hace 15 a?os, la familia Twigg y la familia Mays coincidieron, con otras familias, en una cl¨ªnica de Florida en la que nacieron sus hijas, Arlena y Kimberly. Las ni?as fueron cambiadas de cuna cuando ten¨ªan pocas horas de vida. Aparentemente, se trat¨® de un error.
Nadie se dio cuenta del cambio hasta que una de las ni?as, Arlena, enferm¨® gravemente en 1988. Los Twigg descubrieron entonces dos cosas, a cual peor: que Arlena sufr¨ªa una enfermedad cong¨¦nita terminal y que no era hija suya. Cuando la ni?a muri¨® por el defecto de coraz¨®n que sufr¨ªa, ese mismo a?o, Ernest y Regina Twigg emprendieron la b¨²squeda de su verdadera hija. Fue f¨¢cil seguir el rastro a partir de la cl¨ªnica.
Una vez que localizaron a los Mays, comenz¨® su lucha para conseguir acercarse a Kimberly. Al principio se estableci¨® un programa de visitas, pero la relaci¨®n era dificil y los tribunales tuvieron que intervenir. Los Twigg reclamaban la custodia de su hija. Robert Mays, viudo y padre adoptivo, se negaba y alegaba que la relaci¨®n de Kimberly, una adolescente, con sus padres biol¨® icos, le estaba suponiendo un serio problema emocional. Kimberly quer¨ªa quedarse con ¨¦l.
En agosto de 1993, el tribunal decidi¨®, entre la emoci¨®n que el caso estaba provocando en la sociedad norteamericana, que la joven ten¨ªa derecho a elegir familia. Kimberly llor¨® de agradecimiento y con ella millones de personas que simpatizaban con su divorcio.
Semanas despu¨¦s, casi nadie prest¨® atenci¨®n al testimonio de una enfermera de la cl¨ªnica de Florida que se decidi¨® a contar -despu¨¦s de descubrir que estaba enferma de c¨¢ncer- que el cambio de ni?as no fue un error y que se hizo, supuestamente entre un m¨¦dico y los Mays, cuando se descubri¨® el defecto cong¨¦nito de Arlena. Robert Mays, profundamente por la situaci¨®n, nunca hizo ning¨²n comentario.
Hace una semana, se supo que Kimberly Mays hab¨ªa abandonado su casa en Sarasota, Florida, para entrar en un refugio del YMCA para j¨®venes con problemas. Y el martes la joven apareci¨® en Sebring, a 75 kil¨®metros, en la casa de sus padres biol¨®gicos, aparentemente dispuesta a vivir con ellos. Los Twigg no han hecho declaraciones y han dejado la ciudad durante unos d¨ªas para evitar c¨¢maras y micr¨®fonos.
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