La ¨²ltima batalla del indio Ger¨®nimo
Walter Hill vuelve al 'western' con un filme sobre la legendaria figura del jefe apache
Fue la peor de sus pesadillas, el azote de los colonos de los territorios de Arizona y Nuevo M¨¦xico a finales del siglo pasado. Para algunos Ger¨®nimo era un indio cruel y salvaje, para otros un visionario que reivindic¨® el derecho de los apaches a vivir en la tierra de sus antepasados. Walter Hill (director) y John Milius (guionista) han vuelto a contar esa vieja leyenda del oeste en un filme ¨¦pico y cruel, Ger¨®nimo, la leyenda, un western crepuscular. Wes Studi, el cherokee que interpreta al guerrero apache, estuvo ayer en Madrid para presentar la pel¨ªcula, que se estrenar¨¢ en abril.
Frente a otros grandes y belicosos jefes apaches (Cochise, Victorio, Mangas Coloradas), la figura de Ger¨®nimo ha sido siempre la m¨¢s famosa. En realidad s¨®lo fue un hombre que, con un peque?o grupo de guerreros chiricahuas, mantuvo en jaque durante a?os a miles de soldados. "Sabemos mucho sobre ¨¦l, porque su nombre ha sido muy utilizado. Cuando se convirti¨® en un prisionero de guerra, los ¨²ltimos 27 a?os de su vida, era tan famoso que vend¨ªa a cinco d¨®lares los botones de su chaqueta. Para nosotros los indios, es un s¨ªmbolo de la resistencia contra el cambio en los modos de vida tradicionales", dice Studi.Walter Hill y Milius (autor de la historia original y guionista junto a Larry Gross) han narrado los dos ¨²ltimos a?os de la vida en libertad de Ger¨®nimo, desde su fuga de la reserva del Arroyo del Pavo, en 1885, hasta su rendici¨®n, el 5 de septiembre de 1886. Casi todos los protagonistas del filme son personajes hist¨®ricos: el general George Crook (Gene Hackman, responsable de las campa?as apaches), el general Nelson Miles (Kevin Tighe, reemplaz¨® Crook, odiaba a los apaches), el teniente Charles Gatewood (Jason Patric, el hombre ante el que se rindi¨® Ger¨®nimo por ¨²ltima vez), Al Siber (Robert Duvall, jefe de exploradores apaches del Ej¨¦rcito de Estados Unidos) o el teniente Britton Davis (Mat Damon, narrador del filme, escribi¨® un diario en el que se basa la historia).
Licencias po¨¦ticas
Pero las licencias po¨¦ticas son numerosas: el diario en el que Gatewood cuenta la rendici¨®n de Ger¨®nimo est¨¢ publicado en castellano (en el volumen Ger¨®nimo, una recopilaci¨®n de textos sobre el guerrero editado por J. J. Ola?eta) y las diferencias son considerables. "Hay licencias po¨¦ticas con respecto a los hechos, aunque el filme narra b¨¢sicamente lo que ocurri¨®. Pero es verdad que los lugares, los personajes o las fechas est¨¢n cambiadas en bastantes momentos", asegura Wes Studi.La documentaci¨®n sobre el caudillo chiricahua es muy abundante: cientos de novelas (la mejor de todas ellas est¨¢ escrita por Edgar Rice Burroughs, el creador de Tarz¨¢n), los peri¨®dicos de la ¨¦poca hablaron mucho (y mal) de sus andanzas, el propio Ger¨®nimo dict¨® su autobiograf¨ªa al final de sus d¨ªas y existen bastantes testimonios de los militares que participaron en las guerras apaches, adem¨¢s de dos pel¨ªculas anteriores sobre su figura (dirigidas en 1939 por Paul Sloane y en 1962 por Arnold Laven). Edward S. Curtis, el mejor historiador de los indios norteamericanos (publicado tambi¨¦n por J. J. Ola?eta), describi¨® as¨ª a los apaches: "Eran n¨®madas aut¨¦nticos, con un anhelo de guerra innato y un valor y resistencia no superados por ning¨²n pueblo. No hay ninguno tan apto para llevar a cabo una guerra predatoria continua. Toda forma de vida le paga tributo". Los apaches de Ger¨®nimo, una leyenda son unos tipos duros, nacidos para sobrevivir en la frontera en una guerra constante que, al final, perdieron.
Walter Hill (director de westerns como Forajidos de leyenda o thrillers como The Warriors) y Milius (guionista Apocalypse Now y director de El viento y el le¨®n, un bello filme de aventuras) nunca se han cortado un pelo. Sus filmes son violentos, descarnados. Ger¨®nimo no es una excepci¨®n a la regla. Muestra como los blancos enga?aron a Ger¨®nimo en todas sus rendiciones, como jam¨¢s cumplieron sus promesas y le mantuvieron en reservas muy lejos de su tierra natal. Pero tambi¨¦n muestra que el guerrero apache no fue precisamente una hermanita de la caridad: era cruel y no pesta?eaba, cuando estaba en guerra, a la hora de cargarse a cualquier. forma de vida: civiles, mujeres, ni?os. "Respeto la resistencia rom¨¢ntica de Ger¨®nimo, pero la lucha en el desierto no era rom¨¢ntica. No hay gloria en la guerra, es siempre un asunto cruel y sucio. De todos modos, los apaches han sufrido muchos estereotipos, la propia palabra apache suscita pasiones, siempre se crey¨® que eran los indios m¨¢s sangrientos".
Actualmente, la situaci¨®n de los apaches, y de los indios norteamericanos en general, no es precisamente maravillosa. Entre las diferentes tribus (mescaleros, chiricahuas, coyoteros ... ) quedan unos 40.000 apaches, que, seg¨²n informaciones de Survival Internacional, sufren problemas sociales de paro y alcoholismo. "No luchamos por nuestros derechos individuales. Ya los tenemos, pero s¨ª reivindicamos nuestra identidad como grupos nacionales. Es algo por lo que lucharemos ahora y siempre", manifiesta Wes Studi, que ha participado en. otros dos filmes en los que se denuncian las masacres que sufrieron los indios durante la conquista del oeste: Bailando con lobos, de Kevin Costner, y El ¨²ltimo mohicano.
Ger¨®nimo es una pel¨ªcula de la frontera, del desierto m¨¢s duro, que recupera p¨¢ginas crueles y ¨¦picas de la historia de Estados Unidos. Wes Studi cree "para las nuevas generaciones estos filmes son muy importantes porque, a trav¨¦s de ellos, se ven como una parte fundamental de la historia de este pa¨ªs".
Babelia
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