PSV ?cooperativa?
Como ciudadana y concejal en un Ayuntamiento de nuestra comunidad, donde, ?c¨®mo no!, sufrimos el problema que ha desencadenado el hundimiento de PSV, me gustar¨ªa hacer algunas puntualizaciones al tema.No puedo por menos que manifestar la enorme preocupaci¨®n que me supone el sesgo que, a mi entender, se est¨¢ dando al asunto y que est¨¢ llevando a la opini¨®n p¨²blica a la desconfianza hacia f¨®rmulas de obtenci¨®n de vivienda m¨¢s ventajosas, y, lo que es a¨²n m¨¢s significativo, la carga de profundidad que se ha colocado en los cimientos sindicales.
Entiendo que hay que deslindar la p¨¦sima gesti¨®n de un grupo inversor, que es lo que fue en realidad PSV, del funcionamiento de otras promociones cooperativas y sus juntas gestoras (por ejemplo, Vitra, Covibar, Rosa Luxemburgo, etc¨¦tera), cooperativas que no han gozado de la cobertura que las administraciones locales y auton¨®micas dieron en su momento a PSV, y que, sin embargo, tienen a sus socios cooperativistas ya ocupando, o a punto de ocupar, sus viviendas. ?Por qu¨¦ ¨¦stos s¨ª y PSV no? Sencillamente, porque el dinero entregado para la construcci¨®n de viviendas ha sido destinado para eso y no para otros proyectos o inversiones; por tanto, las cooperativas funcionan y hay que seguir apoyando este tipo de promociones, que ayudan a conseguir un derecho constitucional como la vivienda.
Y el segundo problema radica en UGT, responsable de este asunto, y a quienes les interesa, porque las continuas descalificaciones que se est¨¢n haciendo a este sindicato salpican a todo el movimiento sindical.
Estamos sufriendo un lento desprestigio de las instituciones por culpa del comportamiento de algunos de sus integrantes, y al no ser ¨¦stos debidamente escarmentados la sociedad nos clasifica a todos como palos de una misma madera.
Recapacitemos. Es probable que ello nos lleve a racionalizar las informaciones y nos demos cuenta de que no todos son, o somos, culpables; que la UGT son tambi¨¦n afectados; que los sindicatos y sus hombres y mujeres han hecho mucho por los trabajadores de este pa¨ªs, y que estas continuas descalificaciones gen¨¦ricas tan s¨®lo perjudican a los trabajadores.
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