Cultura del desacuerdo
"Renovadores de la nada". A trav¨¦s de dicha expresi¨®n contenida en la carta de Txiki Benegas al presidente del Gobierno la Semana Santa pasada, la sociedad espa?ola se enter¨® de lo que era un secreto a voces en el interior del partido y en los c¨ªrculos pol¨ªticamente informados del pa¨ªs: que la crisis en el interior del PSOE hab¨ªa alcanzado un grado de intensidad muy alto.Si no se recuerda este punto de partida, dif¨ªcilmente se puede entender lo que ha significado el 33? Congreso Federal. En menos de un a?o, el PSOE ha pasado de ser un partido al borde de la ruptura, cuyo secretario general tiene que disolver las C¨¢maras y convocar elecciones antipadas, porque el partido "no aguantaba" hasta octubre, a un partido que es capaz de celebrar un congreso con tensi¨®n, pero con orden y que consigue pactar sus desacuerdos, aprobando de manera muy mayoritaria tanto el programa o ponencia-marco como los ¨®rganos de direcci¨®n.
Esto es algo ins¨®lito. No s¨®lo en Espa?a, pero sobre todo en Espa?a. Nuestra experiencia desde 1977 en lo que a la capacidad de los partidos pol¨ªticos para resolver sus diferencias internas sin escindirse es muy negativa. Con la excepci¨®n del PSOE y CDC no hay ni un solo partido que no haya vivido un proceso de desintegraci¨®n o escisi¨®n: la Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico pas¨® del Gobierno a la desaparici¨®n; AP-PP no ha concurrido a sucesivas elecciones bajo las mismas siglas desde la transici¨®n habiendo necesitado diversas idas y venidas de Fraga por encima de Hern¨¢ndez Mancha hasta alcanzar una cierta estabilidad con Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar; el PCE se desintegr¨® a partir del 81 pasando a ser una caricatura de lo que fue en la transici¨®n; el PNV se escindi¨® con el enfrentamiento entre Arzalluz y Garaikoetxea cre¨¢ndose EA, el PA tambi¨¦n se ha escindido por el enfrentamiento entre Rojas Marcos y Pacheco, etc¨¦tera.
A la luz de esta experiencia no es de extra?ar que buena parte de la opini¨®n p¨²blica y de la opini¨®n publicada en el pa¨ªs apostara por una salida al contencioso interno socialista similar a la que se hab¨ªa producido en las dem¨¢s fuerzas pol¨ªticas.
Y esto es lo que no se ha producido. Desde el punto de vista de la historia general de los partidos en Espa?a desde 1977 esto es lo m¨¢s significativo del 33? Congreso del PSOE. El ¨²nico precedente de un pacto similar al que se ha cerrado este fin de semana en el Palacio de Exposiciones y Congresos de Madrid, es el que cerraron Jordi Pujol y Miquel Roca en CDC el a?o pasado. Hasta el momento se trata de los dos ¨²nicos partidos que han sido capaces de instalarse en una cierta "cultura del desacuerdo".
Y esto es importante. Para el PSOE sobre todo, pero tambi¨¦n para las dem¨¢s fuerzas pol¨ªticas, y en especial para el PP. La apuesta por la divisi¨®n interna del PSOE como un elemento que acabar¨ªa dinamitando al Gobierno socialista, en la que ha basado su estrategia el PP para alcanzar el poder, no parece que vaya a confirmarse en la pr¨¢ctica.
Dicho en otras palabras: el PP no va a poder llegar a La Moncloa por incomparecencia del adversario, como le ocurri¨® al PSOE en 1982. El PP va a "tener que ganar" unas elecciones competidas. Y con nuestro sistema electoral para ganar unas elecciones primero y poder formar gobierno despu¨¦s, tiene que ir pensando ya en una pol¨ªtica de alianzas. La soledad en que el PP est¨¢ instalado desde siempre y que se ha reflejado en todas las votaciones parlamentarias en los ¨²ltimos 10 a?os, s¨®lo es una estrategia para conquistar el poder si el PSOE se desintegra. No parece, despu¨¦s de 33? Congreso, que esto vaya a suceder.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.