Olaz¨¢bal vive su mejor 'grande'

Si Ballesteros cae, Olaz¨¢bal toma el relevo. El c¨¢ntabro ech¨® ayer por tierra todo el bot¨ªn logrado el jueves. El guipuzcoano no s¨®lo se recuper¨® del mal primer d¨ªa sino que firm¨® una magn¨ªfica tarjeta (67, cinco bajo par) y se coloc¨®, con 141 globales (-3) a s¨®lo a dos golpes del liderato. Olaz¨¢bal, que exhibi¨® una gran solidez y regularidad, manda en el pelot¨®n de los no norteamericanos, un grupo en el que el ingl¨¦s Nick Faldo o el gal¨¦s lan Woosnam (dos ganadores del Masters) lucharon para pasar el corte.Jos¨¦ Mar¨ªa Olaz¨¢bal tuvo un gran d¨ªa, el mejor que muchos le recuerdan. Por lo menos en el Masters. Nunca hasta ayer logr¨® un cinco bajo par en una vuelta. Y, al igual que el jueves no busc¨® disculpas para explicar su mal recorrido, ayer tampoco apel¨® a poder,es sobrenaturales para dar cuenta de su limp¨ªsima tarjeta: cinco -1 y ning¨²n bogey. "Me han funcipnado bien los hierros y el putt", dijo. Si el jueves se automortific¨® afirmando que hab¨ªa jugado como, "un perro" y como "un cerdo", ayer no apel¨® a la zoolog¨ªa ni a la teolog¨ªa: ni un animal ni un ¨¢ngel, simplemente "razones t¨¦cnicas" le hab¨ªan llevado a la alegr¨ªa.

Los t¨®picos que solt¨® despu¨¦s de su limpio recorrido -"ha sido cuesti¨®n de confianza y de tranquilidad; de jugar sin obsesionarme"- suenan a lecci¨®n aprendida y bien repetida, pero, en su caso, tambi¨¦n a sinceridad. El Augusta National Golf Club es un recorrido fastidioso, en el que la menor flaqueza lanza a los jugadores a tirar por la calle del medio y a fastidiarlo todo. Olaz¨¢bal no tuvo que recurrir al socorrido "de perdidos al r¨ªo". Jug¨® como un veterano a sus 28 a?os. En las situaciones comprometidas no arriesg¨® a lo tonto: recurri¨® al sentido com¨¢n; lo que algunos llaman prudencia y otros miedo. Le ayud¨®, claro, una primera vuelta (los nueve hoyos de ida) a pedir de boca. Empez¨® s¨®lido: buenos primeros golpes; buenos segundos golpes con los hierros -a los que les falt¨® para ser perfectos un gramo dq exactitud: con los greens m¨¢s r¨¢pido! y duros del mercado, errar por medio metro una bola lanzada desde m¨¢s de 100 significaba encontrarse con un putt de cinco metros en lugar de con uno de medio-; y buenos putts, normalmente resueltos en el segundo intento. Cuando combin¨® -en los hoyos 6 y 7-un buen acercamiento a bandera con un buen putt corto, logr¨® sendos -1. Cuando fallaba con los hierros -hoyos 9 y 10- tuvo al menos la entereza de controlarse y asegurar en el green. En estos dos hoyos pudo estar parte de la clave de su actuaci¨®n: "afrontar el Amen Corner [hoyos 11, 12 y 13] yendo al par del campo y no presionado te impide hacer muchas bobadas", reconoci¨® Olaz¨¢bal. As¨ª, pudo permitirse ir a asegurar: si la salida no era muy buena, simplemente porfiaba por salvar el par; si era buena, a por el -1. As¨ª de simple. "Cuando juegas relajado y con confianza puedes convertir cualquier recorrido en f¨¢cil", dijo Olaz¨¢bal. Y hasta parece que la suerte acompana, se podr¨ªa a?adir: en el ¨²ltimo hoyo, el 18, Olaz¨¢bal tuvo una salida p¨¦sima -el vasco odia las calles estrechas y la del 18 (flanqueda por pinos) lo es- Olaz¨¢bal lanz¨® su bola a la derecha, intentando sobrepasar unos ¨¢rboles para buscar una buena aproximaci¨®n a,la bandera con su segundo golpe. Se qued¨® corto y parec¨ªa maldito, pero la bola choc¨® con la copa de los ¨¢rboles de tal manera que cay¨® entre los troncos y sin apenas obst¨¢culos; de all¨ª el segundo golpe le fue a una trampa de arena: el mal menor. Luego una buena sacada de b¨²nker y un par de metros para el hoyo: el pulso no le tembl¨® y pudo marcharse jubiloso a firmar su 67, su mejor tarjeta en los ocho a?os que lleva disputando el Masters.La cruz de Ballesteros

Severiano Ballesteros tuvo un d¨ªa vegetariano: de berenjenal en berenjenal anduvo todo el tiempo. Y no porque le apeteciera guardar la l¨ªnea. Y sin sus amados golpes de genio para salir de los atolladeros -su golpe en paraca¨ªdas del 4 del jueves fue ayer destacado por toda la prensa como el mejor golpe del d¨ªa- su resultado no pudo ser sino mediocre: 76 golpes (+4), para un total de 146 (+2). Fue una jornada de excesos: nada menos que en seis ocasiones, Ballesteros se pas¨® y efectu¨® un +1 (desde el principio: en los hoyos 1, 4, 5, 6, 12 y hasta en el 17) por s¨®lo dos -1, en el hoyo 8 y en el 14.

Mejor suerte corri¨® el c¨¢ntabro que otros apellidos ilustres, como como Faldo, Woosnam o Daly, que vivieron media tarde con el miedo en el cuerpo. Su sino dependi¨® del acierto del l¨ªder Mize. Hab¨ªan terminado el recorrido con +5 y el corte, cuando Mize: iba -6, se fij¨® en +4. Mize: baj¨® a -5 y respiraron un poco, pero de nuevo, el de Augusta se march¨® a -6 en el hoyo 15. Mize, definitivamente, salv¨® a los prestigiosos veteranos; un + 1 en el hoyo 18 permiti¨® que Faldo y compa?¨ªa pasaran el corte, aunque fuera por los pelos.

Clasificaci¨®n

1. 139. Larry Mize (EEUU) (68 + 71) 2. 140. Dan Forsman (EEUU) (74+66); Greg Norman (Australia) (70 + 70); Tom Lehman (EEUU) 70 + 70). 5. 141. Olaz¨¢bal (74.+67); Ernie Eis (Sur¨¢frica) (74 + 67); Hale ?rwin (EE4U) (73 + 68); Tom Watson (EEUU) (70 + 71); Tom Kite (EEUU) (69+72). 10. 142. Jim McGovern (EEUU) (72 + 70); Chip Beck (ElEUU) (71 + 71); Mahasoshi Meshiaj (Jap¨®n), (71 +71); lan Baker-Finch (Australia) (71 + 71). 145. Vijay Singh (Islas Fiji) (70+75). 146. Ballesteros (70+76).