Surafricanos expatriados, ancianos e impedidos votan en el primer d¨ªa electoral
La mayoria negra surafricana comenz¨® ayer a saldar cuentas, en las urnas, con el pasado. La primera de las tres jornadas electorales estaba reservada a impedidos, ancianos y expatriados. Cientos de. miles de ellos depositaron su voto emocionados y con el coraz¨®n puesto en quienes lucharon contra el apartheid y no han vivido para ver este momento. "No hay palabras", dijo Nelson Mandela cuando se le pidi¨® en Johanesburgo que expresara sus sentimientos.
"Soy muy feliz"; "Esto es maravilloso" eran los comentarios que m¨¢s se o¨ªan a la salida de un colegio electoral en Woodstock, una barriada reservada para mestizos en Ciudad del Cabo. ,Un minuto antes de medianoche, la bandera del viejo r¨¦gimen fue arriada ante la sede de los nueve parlamentos regionales, y pasado un minuto de las doce comenz¨® a ondear la bandera de la Sur¨¢frica democr¨¢tica.
La primera persona negra en votar en la historia de Sur¨¢frica fue Notasa Paintin, una sobrina de Nelson Mandela casada con un neozeland¨¦s y residente en Wellington, capital de ese pa¨ªs.
En Madrid, 129 ciudadanos surafricanos depositaron su voto en la Embajada surafricana. En su mayor¨ªa eran turistas.
En Woodstock, una anciana negra depositaba por primera vez en su vida su voto a media ma?ana. Lo m¨¢s que pudo decir era que se sent¨ªa "muy feliz". Otra mestiza que ya hab¨ªa votado hace a?os, dijo que ahora era "muy diferente, porque puedes votar al partido en que conf¨ªas. Ha sido maravilloso tener esta oportunidad". Ninguna de las dos quiso revelar su voto. "Ese es mi secreto", dijeron, repitiendo una de las muchas consignas que ha reiterado hasta la saciedad la Comisi¨®n Electoral Independiente (IEC), organismo encargado de velar por el buen desarrollo de la consulta.
Faltaron papeletas
La compleja cita con la democracia estuvo, sin embargo, marcada por inmumerables problemas log¨ªsticos. Muchos colegios abrieron tarde, faltaron papeletas, miles de personas que no estaban en las categor¨ªas autorizadas a votar desbordaron algunos colegios electorales, no hab¨ªa pegatinas del Partido de la Libertad Inkatha (1FP) para agregar en las papeletas distribuidas en Kuazulu-Natal, el feudo del IFP... Mangosuthu Buthelezi, l¨ªder de este partido, anunci¨® la presentaci¨®n de una reclamaci¨®n ante la IEC y hasta el propio presidente Frederick W. de Klerk, manifest¨® que el sistema hab¨ªa fallado y que habr¨ªa que corregirlo con urgencia.
Una de las consignas de la IEC es que las elecciones han de ser libres y limpias y el propio Buthelezi ha supeditado a esas dos condiciones su respeto al resultado final de la consulta.
La tarea es herc¨²lea. No hay censo. Millones de personas residen en ¨¢reas sin ninguna comunicaci¨®n y cada cual puede votar en cualquiera de los 9.000 colegios electorales repartidos por todo el pa¨ªs. El ¨²nico control que se realiza consiste en marcar las manos de quienes han votado con tinta invisible, pero perceptible mediante un detector de rayos ultravioleta de modo que no puedan volver a hacerlo.
"El amanecer de nuestra libertad", de que habl¨® Mandela, pas¨® ayer sin incidentes sangrientos como los habidos en las horas previas a la jornada electoral, que costaron la vida a 21 personas en tres atentados atribuidos a la extrema derecha.
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