Dos a?os detr¨¢s de un Fiat
El caso de Manuela Castro es el paradigma de la tenacidad y, finalmente, de la impotencia. En la madrugada del 24 de febrero de 1991, un Fiat Uno rojo atropell¨® a su hijo David, de 20 a?os, en el Paseo de Extremadura y se dio a la fuga. El chico muri¨® cuatro d¨ªas despu¨¦s y esta modista viuda de 44 a?os convirti¨® la b¨²squeda del conductor en el objetivo de su vida.Durante dos largos a?os se manifest¨® ante el Ministerio del Interior, telefone¨® a peri¨®dicos, coloc¨® ramos de flores en el lugar del suceso, insisti¨® ante la polic¨ªa y lleg¨® a ofrecer un mill¨®n de pesetas por un chivatazo. Sus desvelos tuvieron fruto: el conductor, Francisco Javier Hedo, de 28 a?os, fue detenido en diciembre de 1992.
Hedo guiaba ebrio el coche, a velocidad excesiva y atropell¨® a David con la parte delantera del veh¨ªculo, levant¨¢ndole por encima del cap¨® y despidi¨¦ndole hacia la calzada. Fue condenado a dos a?os de c¨¢rcel (uno por imprudencia temeraria y otro por no auxiliar al herido) y a indemnizar a la madre con 20 millones de pesetas.
Pero el juez le aplic¨® la remisi¨®n condicional de la pena por carecer de antecedentes penales. Ahora est¨¢ en libertad. Manuela siente que su lucha ha sido en vano. "Si ¨¦l se hubiera entregado yo le habr¨ªa perdonado", dec¨ªa siempre. Al saber que el culpable de la muerte de su hijo quedaba en la calle se derrumb¨®. "?Para qu¨¦ han servido el juicio y tantos meses busc¨¢ndole, si le dejan libre?".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.