Los consumidores se quejan de 'Arte virtual'

La falta de informaci¨®n genera protestas. Es lo que viene a decir la Asociaci¨®n de Consumidores y Usuarios de Madrid (CECU) en referencia a la exposici¨®n Arte virtual en el metro de Opera. "No son claros. No te dicen que la visita no puede durar m¨¢s de una hora y no te aseguran que puedas ver todas las atracciones", dice Esther Monreal, en representaci¨®n de los consumidores. "Esto no es un parque de atracciones", replica una portavoz de la muestra. "Es una exposici¨®n de arte", a?ade.

Vieron los carteles, oyeron la m¨¢gica palabra virtual y se embarcaron en una singular aventura. No todos los d¨ªas puede uno ver arte virtual en las v¨ªas del metro. Tomaron el metro como medio de transporte y al llegar a ¨®pera comprobaron que hab¨ªa que salir a la plaza para comprar la entrada.Pero lo peor no era eso. Para entrar en la muestra hab¨ªa que volver a sacar billete. "?se es el primer timo ", denuncia Esther Monreal, del gabinete t¨¦cnico de la CECU. "Lo siento much¨ªsimo, pero no hab¨ªa posibilidad de colocar la taquilla en el metro", dice Michelle Tauzia, del gabinete de prensa de la exposici¨®n.

"Una vez pagada la entrada te dan un folleto por el que te enteras de que la duraci¨®n de la visita es limitada y no te aseguran que lo vayas a ver todo", prosigue Monreal. Y la portavoz de Arte virtual responde: "La mayor¨ªa de la gente saca la entrada con antelaci¨®n [la taquilla de la plaza de ¨®pera es el ¨²nico punto de venta] y luego viene a ver la exposici¨®n". Los responsables de Arte virtual consideran que anunciar la venta anticipada y el aforo limitado es suficiente para evitar descontentos generados por la supuesta falta de informaci¨®n.

Paciencia

Para poder ponerse uno de los dos cascos de realidad virtual disponibles hay que armarse de paciencia. Dos personas entraron el pasado d¨ªa 1 de mayo al recinto. Eran las 18.40, pagaron la 600 pesetas de rigor y les pusieron la pegatina de color que indica el tiempo que se puede permanecer en los t¨²neles del arte virtual: hasta las 19.30, leyeron. Pero hasta las ocho no se repart¨ªan los tiques especiales para el casco.Hab¨ªa tanta gente en el recinto que no pudieron ver m¨¢s que dos de las catorce instalaciones de la exposici¨®n. Decidieron prolongar su estancia para conseguir el codiciado tique del casco. A las 19.50 solicitaron un nuevo boleto y les comunicaron que ya no se vend¨ªan m¨¢s. Pidieron libro de reclamaciones. No lo hab¨ªa. "Eso es fallo nuestro", dice la portavoz de la exposici¨®n, "aunque no s¨¦ si es estrictamente necesario en una muestra que dura tan poco tiempo". Alguien les dijo entonces que trasladaran sus quejas a la Consejer¨ªa de Educaci¨®n y Cultura. "Dudo mucho que nadie de la exposici¨®n haya remitido sus quejas a los se?ores a la Consejer¨ªa", dice la portavoz de la exposici¨®n. Y a?ade: "La gente viene aqu¨ª pensando en jugar a los marcianitos".