Pulso a Gonz¨¢lez

Las diferencias con Felipe Gonz¨¢lez sobre el enfoque de la lucha contra la corrupci¨®n han motivado la dimisi¨®n de Baltasar Garz¨®n al frente de la Delegaci¨®n del Gobierno sobre Drogas, seg¨²n informaron ayer fuentes de su gabinete. "Las razones de la dimisi¨®n no tienen nada que ver con el nombramiento del nuevo ministro, si bien las formas de ¨¦ste tras su toma de posesi¨®n han precipitado la decisi¨®n", aseguraba a media tarde de ayer una persona pr¨®xima a Garz¨®n.Los motivos de la renuncia hab¨ªan sido expuestos por escrito al presidente del Gobierno antes del debate del estado de la Naci¨®n, seg¨²n se precis¨®, y estaban relacionados con el enfoque de los asuntos de corrupci¨®n y el mal funcionamiento de algunas instituciones. Tras el debate, en el que Garz¨®n y Ventura P¨¦rez Mari?o amenazaron con votar con el PP y en contra del PSOE si no se aprobaba una comisi¨®n de investigaci¨®n sobre Filesa, el ex secretario de Estado se reuni¨® con Gonz¨¢lez. En aquel momento se especul¨® con que el presidente hab¨ªa llamado a Garz¨®n para darle un tir¨®n de orejas por poner al partido contra las cuerdas.

Sin embargo, Garz¨®n asegur¨® el mismo d¨ªa que no s¨®lo no hab¨ªa recibido reprimenda alguna por su actitud, sino que ¨¦l hab¨ªa expuesto a Gonz¨¢lez la necesidad de atajar la corrupci¨®n de ra¨ªz y de adoptar medidas contundentes y ejemplarizantes, asumiendo responsabilidades pol¨ªticas con dimisiones en el partido socialista y en el Gobierno.

Personas del entorno de Garz¨®n insisten en que en aquella conversaci¨®n ya se habl¨® de dimisi¨®n, y que todav¨ªa era ministro Antoni Asunci¨®n y no se sab¨ªa que ¨¦ste iba a dimitir, pues no se hab¨ªa producido todav¨ªa la fuga del ex director de la Guardia Civil Luis Rold¨¢n.

Lo que ocurre, indican las citadas fuentes, es que el nombramiento de Juan Alberto Belloch como ministro del Interior ha sido la confirmaci¨®n para Garz¨®n de qu¨¦ Felipe Gonz¨¢lez no tiene previsto adoptar la pol¨ªtica de "bistur¨ª hasta el fondo" que le hab¨ªa recomendado el magistrado excedente. Belloch y Garz¨®n mantienen desde hace tiempo posiciones encontradas, y, tras el nombramiento del primero, se han producido un par de desencuentros.

Para el lunes est¨¢ prevista una conferencia de prensa de Garz¨®n en el Congreso, donde previsiblemente anunciar¨¢ su renuncia al acta de diputado -como independiente en las listas del PSOE- y su vuelta al Juzgado Central de Instrucci¨®n n¨²mero 5 de la Audiencia Nacional.

Baltasar Garz¨®n, de 38 a?os, natural de Torres (Ja¨¦n) ha permanecido nueve meses en el Gobierno y era delegado del Plan Nacional sobre Drogas desde el 30 de julio del a?o pasado.

Irrumpi¨® en la pol¨ªtica como un seguro valor pol¨ªtico para el PSOE y revolucion¨® la escena electoral. Diez meses despu¨¦s, es un capital agotado que el partido socialista no quiere. Cuando decidi¨® pasarse a la pol¨ªtica Garz¨®n recibi¨® el apoyo de un grupo de estudiantes que abarrotaban un aula de la facultad de Filosof¨ªa de Madrid. Hace una semana los j¨®venes que esperaban la celebraci¨®n de un concierto en la plaza de toros de Valencia le abuchearon y le llamaron "hijo de puta" mientras hac¨ªa la ola.

Garz¨®n hab¨ªa dejado de ser un lujo para el Gobierno. Es m¨¢s, se hab¨ªa convertido casi en un problema. No tanto por hechos que hubiera protagonizado, sino por tantos como quer¨ªa protagonizar.

Hay una imagen, una ¨²ltima imagen, que lo resume: Garz¨®n se present¨® en la comisi¨®n de Justicia e Interior del Congreso, de la que no es miembro, el d¨ªa en que Asunci¨®n acudi¨® a explicar la fuga de Luis Rold¨¢n.

Para el Gobierno, Baltasar Garz¨®n ten¨ªa una irrefrenable ambici¨®n de intervenir en todas las salsas contra la corrupci¨®n. Ya no era s¨®lo el papel de jefe m¨¢ximo de lucha contra la droga. Era el deseo de aparecer como l¨¢tigo de corruptores all¨¢ donde aparecieran. Algo que no gustaba en absoluto al Gobierno.