Los padres de Bulger exigen, que los ni?os que mataron a su hijo no salgan nunca de la c¨¢rcel

"Estoy dispuesta a dedicar mi vida a que esos dos no salgan jam¨¢s de la c¨¢rcel", dijo ayer Denise Bulger, 26 a?os, madre del peque?o James, asesinado por los ni?os JonVenables y Robert Thompson el a?o pasado en Liverpool. Denise y su marido, Ralph, llevando en brazos a su beb¨¦ de cinco meses, Michael, encabezaron un cortejo familiar que dep¨®sit¨® ayer en la sede delMinisterio del Interior, en Londres, varios volumenes conteniendo 287.000 firmas en apoyo de su petici¨®n de que Venables y Thompson, 11 a?os cada uno, permanezcan en prisi¨®n por el resto de sus vidas.

Escoltados por su abogado, Sean Sexton, y varios miembros de la familia, los Bulger, dejaron ayer constancia de que su odio hacia los dos peque?os asesinos no se ha mitigado lo m¨¢s m¨ªnimo en estos ¨²ltimos meses.James Bulger fue secuestrado por sus dos asesinos en un descuido de su madre, mientras compraba en el Shopping Mall de Bootle (Merseyside). James, de dos a?os, fue salvajemente torturado antes de morir y abandonado en la v¨ªa del tren.

La petici¨®n de los Bulger ante el ministro del Interior, Michael Howard, viene a ser una primera respuesta a la propuesta de los magistrados, que tras el juicio, en noviembre de 1993, recomendaron que los dos ni?os condenados a cadena perpetua por un jurado no pasaran m¨¢s de diez a?os de su vida entre rejas. La longitud de la condena depende del ministro del Interior y, en ¨²ltima instancia, de la voluntad de la Reina Isabel II.Videojuegos

Pero Denise Bulger no est¨¢ satisfecha. Ni ella ni una parte importante de la sociedad brit¨¢nica. "Creo que viven ahora mejor que antes", dijo ayer una crispada Denise Bulger ante los periodistas. "Tienen videojuegos y no les falta de nada. Y eso est¨¢ fatal. S¨®lo querr¨ªa agarrarles con mis manos. Que me los dejaran s¨®lo cinco minutos". Su marido, Ralph, de 27 a?os, que recientemente compareci¨® ante un tribunal despu¨¦s de protagonizar una violenta pelea en un pub de Merseyside, donde reside la pareja, se expres¨® tambi¨¦n con toda crudeza.

"Lo ¨²nico que creo es que hay que apartarles de la sociedad para que no vuelvan a repetir lo que hicieron. Son aut¨¦nticos demonios".

La familia est¨¢ dispuesta a dar la batalla tambi¨¦n contra la iniciativa encabezada por un abogado norte americano de llevar el caso de Venables y Thompson ante el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo. La tesis de este jurista que prefiere mantener el anonimato es que ambos peque?os sufrieron tremendas presiones durante un juicio que conmovi¨® a la opini¨®n p¨²blica brit¨¢nica y que no les depar¨® las m¨ªnimas garant¨ªas legales.

Ambos hab¨ªan alcanzado la edad m¨ªnima, los 10 a?os, a partir de la cual en el Reino Unido una persona es susceptible de responder judicialmente de sus actos. La tensi¨®n en torno a este tema es todav¨ªa tan fuerte que la familia de Thompson ha declarado ya que no piensa autorizar dicho recurso.

A¨²n as¨ª, la noticia de la apelaci¨®n ha. llenado de indignaci¨®n a los Bulger, miembros, como las familias de los asesinos de sus hijos, de las clases m¨¢s desheredadas del ¨¢rea deprimida de Liverpool.

Una vez en Londres, los Bulger aprovecharon tambi¨¦n para dejar constancia de su indignaci¨®n por el hecho de que se exhiban dos cuadros que reproducen el "martirio" de su hijo, en la galer¨ªa londinense Whitechapel. La exposici¨®n les ha escandalizado pese a las justificaciones ofrecidas por el autor de los cuadros, Jamie Wagg, quien declar¨® ayer que escogi¨® el tema del caso Bulger "por su enorme sentido de la tragedia".