El Compostela alcanza la glor¨ªa a costa del Rayo
El equipo de David Vidal vuelve a Segunda Divisi¨®n tras ser derrotado por 3-1
El que menos se esperaba, el modesto Compostela, alcanz¨® la gloria para un f¨²tbol gallego resentido por las frustraciones del Deportivo y del Celta. El Compostela logr¨® por primera vez la m¨¢xima categor¨ªa en un partido con sabor rancio, con todos los alicientes del f¨²tbol menos el buen juego. El Rayo pag¨® en su ¨²ltima parada el peaje a un f¨²tbol r¨¢cano y especulativo con el descenso a Segunda. Ohen, con su oportunismo, abri¨® al Compos las puertas del cielo.Los dos equipos descargaron adrenalina desde el primer toque de silbato, desparramaron por el c¨¦sped toda la tensi¨®n acumulada en dos semanas de agon¨ªa. Los jugadores pusieron todo el m¨²sculo, sin dejar apenas margen para la reflexi¨®n. S¨®lo los m¨¢s sensatos, como Abad¨ªa, ped¨ªan f¨²tbol en lugar de guerra. Pero era uno entre una multitud de codazos, cargas desleales y tacos amenazantes de la mayor¨ªa.
El partido estuvo caliente desde la primera jugada. Urzaiz entr¨® en el ¨¢rea con fuerza y fe y se fue al suelo con tanta aparatosidad que D¨ªaz Vega no se crey¨® que Modesto le hubiese derribado. Parec¨ªa que el Rayo, todav¨ªa en Primera, se sent¨ªa obligado a llevar la iniciativa en todas las facetas. Incluso en el juego, como en el minuto 11, cuando Urzaiz dej¨® un bal¨®n de gol que Visnjic estrell¨® en un defensa y en el portero y que Calder¨®n, finalmente, mand¨® alto. Fue el Compostela, sin embargo, el que tuvo un detalle de equipo de superior categor¨ªa. En su primer ataque sostenido, Fabiano le birl¨® un bal¨®n a Pablo y lo puso en el ¨¢rea para que Ohen llevase a Galicia la esperanza del ¨¦xito.
El Rayo, acorralado, reaccion¨® a¨²n con m¨¢s rabia, pero con menos f¨²tbol. As¨ª, s¨®lo consigui¨® coleccionar un par de tarjetas y dos aproximaciones que pusieron en evidencia las carencias rematadoras de los de David Vidal. El nuevo gol de Ohen, en un despiste de Wilfred, parec¨ªa sentenciar el partido, aunque la r¨¢pida respuesta rayista con el gol de Visnjic devolvi¨® toda la emoci¨®n al campo y a las gradas. El ¨²ltimo error de Hugo, al buscar la expulsi¨®n en una entrada sin sentido en el centro del campo a Bodel¨®n, s¨ª fue determinante. El Rayo, tan desquiciado en el campo como su entrenador, ya no dio m¨¢s de s¨ª e incluso sufri¨® la humillaci¨®n de un nuevo gol.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.